Casi destruido por un incendio en 2019, el ex primer ministro francés Édouard Philippe anunció que París celebraría un concurso internacional de diseño para reconstruir y reimaginar la icónica aguja de la catedral de Notre-Dame. La aguja se derrumbó (junto con gran parte del techo del edificio) en un incendio que los fiscales creyeron que fue causado por una falla eléctrica o un cigarrillo.

En el momento de su anuncio, Philippe dijo que el gobierno francés buscaría "una nueva aguja que se adapte a las técnicas y los desafíos de nuestra era". Agregó el presidente francés Emmanuel Macron, en una declaración de apoyo en ese momento, "un gesto arquitectónico contemporáneo" haría a Notre-Dame "aún más bella".

Sin embargo, durante la semana pasada, Macron dio marcha atrás en su apoyo a un rediseño modernista de Notre-Dame. "El presidente de la república se ha convencido de la necesidad de restaurar Notre-Dame de Paris de la manera más consistente posible a su último estado completo, coherente y conocido", dijo el Palacio del Elíseo en un comunicado. En otras palabras, el El "rediseño" se verá exactamente igual al diseño gótico original, que es lo que muchas figuras de alto rango en el gobierno francés estaban presionando públicamente. Macron agregó que buscará orientación en la Comisión de Patrimonio Nacional y Arquitectura del país para obtener orientación sobre los próximos pasos de Notre-Dame .

La idea de que la aguja original, concebida por el arquitecto francés Viollet-le-Duc en el siglo XIX , sería reemplazada por una reinvención moderna se encontró con las cejas levantadas de arquitectos, académicos y parisinos, el 55% de los cuales, según una encuesta. , favoreció el original. El Senado francés incluso aprobó un proyecto de ley el año pasado que requería que la restauración de Notre-Dame fuera fiel a su "último estado visual conocido".

La torre, que tenía 300 pies de altura y estaba hecha de madera y plomo, se agregó a la catedral en su renovación del siglo XIX. Mientras tanto, los rediseños propuestos presentados al gobierno francés eligieron materiales modernos y enfoques de diseño sostenible que se parecían muy poco al original. Por ejemplo, en el mes siguiente al incendio, la firma del arquitecto Vincent Callebaut presentó un plano de vidrio ecológico , completo con energía solar y una granja urbana para parisinos vulnerables y sin hogar. Studio NAB, con sede en París, propuso un invernadero gigante , lleno de colmenas y maceteros hechos de los restos quemados del techo. El gobierno, sin embargo, eligió ir por otro camino.

Mientras tanto, una competencia no oficial para rediseñar Notre-Dame fue organizada por GoArchitect, un editor independiente. Vio 226 entradas de rediseño de 56 países, con el ganador elegido después de que más de 30,000 miembros del público emitieran los votos. Los arquitectos chinos Zeyu Cai y Sibei Li ganaron con " Paris Heartbeat ", un diseño que reinterpretó la aguja como un caleidoscopio hecho de un techo de muchos espejos que reflejaría "el entorno urbano cambiante" fuera de la catedral. El diseño del dúo también incluía una cápsula del tiempo, cuyo sistema de levitación magnética lo movía "rítmicamente arriba y abajo, respirando y latiendo junto con la ciudad".

No está claro qué sucederá con los diseños alternativos concebidos por Callebaut, NAB y los otros estudios a la luz del cambio de imagen de Macron. Matthias Altwicker, el arquitecto principal en el estudio A + H y profesor asociado de arquitectura en el Instituto de Tecnología de Nueva York, ve la decisión de mantener el diseño original como una forma de evitar lo que ha sido un debate público extremadamente frenético, aunque considera la decisión una oportunidad perdida dado "el liderazgo de París, históricamente, en el pensamiento arquitectónico progresivo con proyectos como el Centro Pompidou". Altwicker señala que existe un precedente para dar a los sitios históricos rediseños contemporáneos, así como monumentos que han absorbido diferentes estilos arquitectónicos a lo largo del tiempo, como la Basílica de San Pedro en Roma. 

Y, como la firma de Callebeaut señaló en una descripción sobre su diseño, a pesar de las reglas de preservación histórica, Notre-Dame también tiene una historia de adaptación a los tiempos: "Desde el gótico primitivo en el siglo XII hasta su restauración por Viollet- Le Duc en el siglo XIX, a través del gótico radiante del siglo XIII y el gótico extravagante del siglo XIV, la catedral de Notre-Dame surge sin duda de siglos de trabajo y de inspiración polifacética ”, dijo Callebeut en un comunicado .