El gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, y el director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto Hernández, dieron el banderazo de reapertura de la Zona Arqueológica de Monte Albán siguiendo los protocolos para el cuidado de la salud tras ocho meses de permanecer cerrada a causa de la contingencia sanitaria ocasionada por la COVID-19.

Ambos funcionarios coincidieron en que esta reanudación de actividades impulsará con mayor fuerza la recuperación económica y la vida cultural del estado de Oaxaca, en particular de su ciudad capital.

El titular del INAH recordó que Oaxaca es uno de los estados con los que mayor comunicación ha mantenido el Instituto en los últimos tiempos, no sólo por tener una agenda común en materia de reconstrucción del patrimonio histórico afectado por los sismos de 2017, sino porque en el mandatario local, el INAH ha encontrado “un aliado fundamental en el impulso al estudio, cuidado, protección legal, divulgación y difusión del inagotable patrimonio oaxaqueño”.

Asimismo, reconoció “la disposición, colaboración y compromiso de los trabajadores del INAH, cuya participación ha sido fundamental para que esta reapertura se lleve a cabo con todos los protocolos sanitarios y cuidados indispensables y con toda la seriedad que se requiere para garantizar la salud y seguridad del patrimonio y de los visitantes”.