El Sindicato de Jugadores de las Grandes Ligas y la Oficina del Comisionado han pactado un nuevo acuerdo tras la nueva ola de contagios que afectó a 13 jugadores de los Cardenales de San Luis y 20 de los Marlines de Miami.

La suspensión de varios partidos orilló a ambas partes a acordar un protocolo para reducir el riesgo de brotes en otras novenas. Las repercusiones disciplinarias podrían ser severas para los que irrumpan con el plan, el cual contempla los siguientes puntos:

• Jugadores y el staff deberán utilizar el cubrebocas en todo momento durante su estancia en el parque, sea en la caseta o el bullpen. Solamente podrán quitárselo mientras estén en el terreno de juego.
• Jugadores y personal del equipo deberán portar mascarilla en los hoteles, siendo la única excepción sus habitaciones.
• Para minimizar la convivencia, los equipos locales deberán contar con áreas al aire libre para los visitantes. Estos espacios deben fomentar la sana distancia durante juegos suspendidos por la lluvia.
• Las delegaciones que viajen deberán reducirse solo al personal necesario.
• Los miembros del equipo visitante deberán notificar a una oficial de la organización en caso de salir del hotel.
• Los equipos locales tienen prohibido visitar lugares recreativos como bares, restaurantes, centros comerciales y cualquier establecimiento en donde existan aglomeraciones. 

Fallar alguno de los siguientes puntos, desembocaría en una multa económica o incluso hasta en una suspensión por el resto de la campaña.

Bajo estos estatutos, las Grandes Ligas intentarán garantizar la seguridad de sus involucrados para poder terminar un calendario, ya de por sí atípico, con tanta estira y afloja entre las partes involucradas.