
La aerolínea paraestatal del Gobierno tendrá como principales clientes a los beneficiarios de programas sociales, además de que buscará operar rutas desatendidas por líneas aéreas nacionales.
De acuerdo con el cuarto informe de Gobierno actual, al cierre del año pasado había alrededor de 24 millones de beneficiarios de programas sociales, de los cuales, 10.5 millones reciben la pensión de adultos mayores, 11 millones tienen alguna beca y 2.3 millones están inscritos al programa de Jóvenes Construyendo el Futuro.
La conformación de una aerolínea de bajo costo, con una flota no mayor a 10 aeronaves llega a costar alrededor de 20 millones de dólares, dependiendo de las condiciones de arrendamiento vigentes.