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Al minuto

por Martín Marquez
07-02-2022

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Huauchinango, con crisis de Covid y el alcalde hace fiesta para 500 personas

Huauchinango es uno de los municipios del estado que más casos de Covid-19 ha registrado desde que inició la emergencia sanitaria. Se estima que tan solo en este año se han detectado 400 nuevos contagios. Frente a esta situación, el edil de esa ciudad, Rogelio López Ángulo, se ha destacado por ser uno de los alcaldes que poco o nada ayudan a la prevención. Prueba de ello es la fiesta privada de 400 invitados que organizó este fin de semana.


López Ángulo también se destaca porque dos veces ya ha resultado positivo de Covid-19 y por esa razón, pareciera tomar una actitud de omitir cualquier regla de prevención frente a este problema de salud pública que ha dañado al mundo en los últimos 23 meses.


El sábado por la noche, se realizó una fiesta de tal manera que luciera en la cabecera municipal, que no pasara desapercibida, pues se efectuó en el Recinto Ferial de Huauchinango, que es un lugar en donde siempre llama la atención cualquier tipo de actividad.


Dicho festejo fue por los 15 años de la joven Gladis Pamela López Lechuga, quien es hija de Saúl López y Magali Lechuga, quienes son hermano y cuñada, respectivamente, del presidente municipal.


El padrino y organizador de la fiesta fue el alcalde Rogelio López Ángulo, quien apenas hace un par de semanas había resultado positivo de Covid-19.


Los cálculos conservadores apuntan a que acudieron entre 300 y 400 invitados, pero algunos de los asistentes sostienen que pudo haber mucho más de 500 personas, pues no todos los convocados a la festividad llegaron al mismo tiempo y permanecieron toda la duración del festejo, que se prolongó hasta la madrugada del domingo.


Como siempre ocurre en estas reuniones grandes, al principio se establecen medidas de seguridad, como el usar cubre bocas, gal antibacterial, usar tapetes sanitizantes. Al paso de las horas, todo mundo se olvida de los controles sanitarios y al ritmo del baile ya nadie se acuerda de evitar contactos que puedan terminar en contagios.


Se dice que Rogelio López Ángulo por primera vez se contagio de Covid-19 fue en las actividades proselitistas que el año pasado, que bajo las siglas del Partido Nueva Alianza, le permitieron ganar por segunda vez la alcaldía de este municipio. La primera vez que fue edil llegó al cargo bajo la postulación del PRI, durante el sexenio de Melquiades Morales Flores.


La segunda vez que se contagió fue a principios de este año. Al respecto, se han generado dos tipos de especulaciones y molestia entre la población.


López Ángulo es originario de Mocorito, Sinaloa, y resulta que allá pasó las fiestas de fin de año. Se dice que, para disfrutar el viaje, se fue manejando hasta el noroeste del país.


Y se comenta que, en esas fiestas decembrinas, unos 27 parientes de la extensa familia del edil habrían salido positivos de coronavirus.


El alcalde regresó a inicios de años a Huauchinango y en la segunda semana de enero, dio a conocer que tenía Covid, luego de haber sostenido una reunión con empresarios de la región y la titular de la Secretaría de Economía, Olivia Salomón. Pareciera que pudo regresar de Sinaloa ya siendo portador del virus.


Otros dicen, que el alcalde en realidad se contagió en Huauchinango y fue consecuencia de que no le gusta protegerse. Siempre que puede se quita el cubre bocas y no entiende que su actividad diaria está altamente expuesto a contraer el virus que tiene de cabeza al mundo.


Tan solo en diciembre de 2021 y febrero de este año, entre funcionarios y regidores, 8 miembros del ayuntamiento han resultado positivos de Covid-19. A algunos de ellos les ha ido muy mal y no ha sido un asunto pasajero, tal como le ha pasado a Rogelio López Ángulos.


Por eso entre muchos pobladores de Huauchinango hay la sensación de que el alcalde no se cuida y no le gusta cuidar a quienes le rodean.


El problema de fondo es que si una autoridad municipal no es la primera en acatar medidas de prevención frente a un riesgo, cualquiera que éste sea, el resto de la población tampoco lo hace.


Los afectos negativos del Covid-19 han sido tan severos que resulta oprobioso que algunos alcaldes le sigan jugando a hacerse “los valientes”.