logo
header-add

Alarman conmociones cerebrales en la NFL

por Redacción
11-10-2022

Comparte en

Los Bills de Buffalo (4-1) brillaron con Josh Allen y sus cuatro pases de anotación en la primera mitad para humillar 38-3 a unos inoperantes Acereros, que hilvanaron su cuarta derrota consecutiva, en una semana cinco de la NFL que alarma por casos de conmoción cerebral.

En Highmark Stadium, Allen hizo lo que quiso ante una mermada defensa de Pittsburgh. Al descanso, el mariscal de 26 años ya tenía definido el juego con 31 puntos en favor de los Bills, en una tarde espectacular para esta franquicia candidata al Supertazón. En contraste, Pittsburgh sigue sin encontrar la brújula tras el retiro de Ben Roethlisberger. Desde 1991, los Acereros no caían en casa de los Bills. Con 348 yardas por aire, Allen empató la segunda mayor cantidad para los primeros dos cuartos en un juego de la NFL desde 1991.

En este partido y en el de Delfines ante Santos se acrecentaron los incidentes por conmoción. Con los Acereros, el ala cerrada Pat Freiermuth –por tercera ocasión en dos años– fue puesto en el protocolo por golpes en la cabeza. A los escalofriantes impactos que recibieron el mariscal Tua Tagovailoa (Delfines) y el corredor Nyheim Hines (Potros) en fechas previas, ayer se añadió un caso igual de grave, del novato Chris Olave, cuya cabeza, en una de sus dos anotaciones con Nueva Orleans, rebotó con el césped y el jugador salió con la mirada perdida en el tercer cuarto, en un enfrentamiento en el que los Santos vencieron a los Halcones Marinos (39-32).

A su vez, el mariscal Teddy Bridgewater (Delfines), sustituto de Tagovailoa, no pudo culminar su participación ante los Jets por un impacto en la testa. Los neoyorquinos ganaron 40-17 a Miami.