José Luis Camacho Acevedo
Bien se dice que todo lo que ocurre en cualquier parte del territorio mexicano, más temprano que tarde, llega a la CDMX para adquirir su verdadera dimensión. Ya sea esta importancia política o social.
Y esos eventos igual corren el mismo circuito comunicativo en Estados Unidos.
Lo que sucede en Florida o California, por citar dos lugares por demás emblemáticos y poblados en las comunidades latinas que habitan y trabajan en Norteamérica, llegan inevitablemente a Washington DC, ciudad que es sede del trabajo principal Armando Guzmán, quien es uno de los más reconocidos líderes de opinión, donde se informa de los acontecimientos más relevantes y se emiten análisis, exámenes y conclusiones de los mismos en beneficio de las audiencias de habla hispana.
Quién duda que desde que inició el segundo mandato como presidente de Estados Unidos de Donald Trump las relaciones del llamado vecino distante con México, han sido de unos altibajos que mantienen a nuestro país en un estado de alerta permanente.
Platicando sobre ese contexto con el reconocido periodista Armando Guzmán, quien tiene una trayectoria en el medio de las mejor calificadas, tanto por su objetividad como por su independencia, coincidimos en que para esa compleja relación que se vive entre México y Estados Unidos, complejidad histórica pero que, como mencionamos al principio de las presentes notas, desde la segunda llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, se ha tornado más inestable y difícil.
A raíz de esa coincidencia de la mayor complejidad que existe en las relaciones entre ambos países, Armando Guzmán y el redactor de estas notas, o sea yo, decidimos crear un espacio de análisis y examen de esa circunstancia que interesa mucho a las diversas audiencias latinas en México y Estados Unidos.
Lo proyectaremos por uno de los canales de redes sociales con mayor audiencia, cuyo nombre, al igual que el del título del mencionado espacio de análisis y examen, lo daremos a conocer de manera conjunta Armando Guzmán desde Washington y yo desde la CDMX.
La Infocracia, como lo analiza Byung-Chul Han, donde hace una proyección, que es un presagio que ya se está cumpliendo.
“La tesis de Han es que esa transformación ha impactado en el ejercicio político de un modo profundo y que dicha transformación pone en riesgo a la democracia.
Tomando como punto de partida la sociedad disciplinaria que describe Michel Foucault en Vigilar y castigar, como característica fundamental de la época moderna, han da un giro al argumento del panóptico para señalar que en las sociedades de la información en que nos encontramos, la vigilancia ya no opera en términos espaciales.
La visibilidad se establece ahora de una manera completamente diferente: No a través del aislamiento, sino de la creación de redes. La tecnología de la información digital hace de la comunicación un medio de vigilancia.
El teléfono móvil como instrumento de vigilancia y sometimiento.
Sin duda que el esfuerzo que realizaremos Armando Guzmán y yo, se inscribe en este cambio que ha transformado radicalmente las formas de comunicación en el mundo.

