Aunque no lo crean, y por muy extraño que parezca este servicio, ya existen baños de vapor para la vagina, por ahora sólo en el Sur de California y en Nueva York. Aunque muchos especialistas no están convencidos de su eficacia; para la cultura coreana, estos baños reducen el estrés, eliminan las hemorroides, regulan el período menstrual, combaten infecciones vaginales y hasta ayudan a la fertilidad.