El "premier" Boris Johnson ha forzado una crisis de Gobierno para frenar la preocupante caída en las encuestas. El secretario de Educación, Gavin Williamson, fue el primero en caer, seguido del titular de Justicia, Robert Buckland, y del ministro para la Vivienda, Robert Jenrick, que será sustituido por Michael Gove.
El secretario de Exteriores, Dominic Raab, deja la cancillería tras ser nombrado ministro de Justicia y vice primer ministro. Liz Truss, titular de Comercio Exterior, asume la cartera de Exteriores. La controvertida secretaria de Interior, Priti Patel, seguiría al frente del ministerio.
La secretaría de Educación la asume Nadhim Zahawi, quien durante el año 2020 ocupó el cargo de secretario de Estado responsable de la distribución de las vacunas contra el Covid.
Johnson también ha nombrado este miércoles a Nadine Dorries como nueva ministra de Cultura y Deporte, tras la salida de Oliver Dowden.
"El Primer Ministro llevará a cabo hoy una remodelación para crear un equipo fuerte y unido que nos permita reconstruir mejor después de la pandemia", confirmó un portavoz de Downing Street. "El Gobierno redoblará sus esfuerzos para cumplir con la prioridades de la gente".
La crisis de Gobierno llega un día después de que Boris Johnson anticipara su "plan de invierno" ante la pandemia, con el impulso a la tercera dosis de la vacuna para los mayores de 50 años y la decisión de no implantar de momento el pasaporte Covid. El 'premier', que el lunes perdió a su madre, Charlotte, se enfrenta a una semana crítica para su inminente futuro político, entre el creciente malestar en su filas.
Por primera vez desde enero, el sondeo de YouGov da por delante en las encuestas al Partido Laborista frente el Partido Conservador (35% a 33%). El líder de la oposición Keir Starmer, devaluado durante meses, ha recortado distancias en el marcador de la popularidad, especialmente desde el reciente anuncio de la subida de las contribuciones a la Seguridad Social, considerada como una "ruptura" de la promesa electoral de Johnson de no subir los impuestos durante su mandato. Starmer acusó el miércoles a Johnson de "estar machacando" a los trabajadores británicos con su impopular medida.