Britney Spears finalmente no enfrentará ningún cargo por el delito menor de agresión, luego de que en julio protagonizó un altercado con su ama de llaves.
Aunque la empleada doméstica de “la princesa del pop" aseguraba que Britney la había golpeado durante una discusión, que más tarde se supo que había girado en torno al bienestar de los perros de la cantante, la fiscalía decidió que la investigación llevada a cabo por el departamento del sheriff del condado de Ventura no arrojó pruebas concluyentes de que alguna de las partes involucradas hubiera recurrido a la violencia física.
Esta conclusión se basa en el hecho de que la empleada de Britney no presentaba ningún signo de haber sido agredida, y en el perfecto estado en que se encuentra el celular que la cantante supuestamente había intentado arrebatarle por la fuerza.
Al parecer, el enfrentamiento entre las dos mujeres se produjo después de que el ama de llaves empezara a preocuparse seriamente por el bienestar de las mascotas de su jefa, que le consta que pertenecen a una raza propensa a todo tipo de problemas de salud y que sospechaba que no estaban siendo atendidas debidamente.
Por esa misma razón acabó tomando la decisión de llevarlos ella misma a un veterinario y, cuando Britney se enteró, se habría puesto furiosa.