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Cambios en los genitales durante el embarazo

por Redacción
28-09-2021

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Algunos de estos cambios son:

        Debido a un aumento del flujo sanguíneo, se produce una alteración en la coloración de la piel y en las mucosas genitales que tienden a adoptar un tono más oscuro (más violeta, o tirando a azul o rojo oscuro). Tras el nacimiento del bebé, la coloración vuelve a su estado original, aunque es necesario mencionar que en algunas mujeres se mantiene un tono más oscuro aún después del parto.

        Aumenta la lubricación vaginal, a veces con cambios también en la textura del flujo, cambios en el olor del mismo, y un pH más ácido. Algunas mujeres embarazadas comentan que sienten humedad constante en la zona genital.

        La mayor vascularización de los genitales hace que aumente también la sensibilidad. Para algunas mujeres esto se traduce en sensaciones más agradables, especialmente en el primer y segundo trimestre.

        Y se produce una mayor congestión de la zona. Muchas mujeres sienten sus genitales prominentes e hinchados, especialmente los labios mayores y menores.

        Un pequeño porcentaje de embarazadas puede presentar venas varicosas (varices vulvares) en sus genitales, que frecuentemente desaparecen unas semanas después de dar a luz.

        Suele aumentar el vello de la zona genital, algo que suele también volver a la normalidad tras el parto.

        Cambios en la excitación y el orgasmo: es interesante mencionar que algunas mujeres, durante el tercer trimestre de embarazo, y conforme este avanza, comienzan a sentir que disminuye su excitación sexual, y que las caricias en los genitales, ya sean propias o de la pareja, producen sensaciones placenteras de menor intensidad. Se suele relacionar este hecho con un aumento ya notable de la congestión genital, tanto de la vagina y el clítoris, como del conjunto de la vulva, debido a que aumentan el peso y el tamaño del feto y además el feto se prepara para el parto y se encaja. Esta disminución de la excitación se relaciona también con que muchas mujeres experimenten una disminución de la intensidad del orgasmo y/o de su frecuencia en este último trimestre. Pero estos cambios no se dan en todas las mujeres, ni de la misma forma, existiendo mujeres que no experimentan disminución alguna en su excitación o en la intensidad de sus orgasmos, y otras que ven aumentada su sensibilidad incluso en el tercer trimestre.