La capital mexicana se declaró el viernes en emergencia por un nuevo repunte en los casos de coronavirus y el crecimiento en las hospitalizaciones, que se acercan peligrosamente a las tasas de mayo, el peor momento de la pandemia en el país.
Hace una semana, el presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a los habitantes de Ciudad de México que en Navidad no salgan de su casa para visitar a familiares y comprar regalos, y la alcaldesa de la populosa ciudad, Claudia Sheinbaum, anunció la reducción al mínimo de la operación del sector público y el regreso al trabajo remoto en las empresas.
“Estamos en alerta por COVID-19, en emergencia por COVID-19”, dijo la funcionaria en rueda de prensa, al detallar que la ocupación de las camas generales para atender a los que padecen esa enfermedad en hospitales de la urbe está al 78% y las camas con ventilador se encuentran al 62%.
demás, el promedio de ingresos hospitalarios diarios en la ciudad, que alberga a más de nueve millones de habitantes, ha subido a 400 desde los cerca de 300 en el mes de noviembre. “Estamos a una semana de cumplir con la capacidad hospitalaria del límite máximo que se tenía en mayo”, admitió.
La alcaldesa aseguró que el reciente pico de contagios se debe a un incremento de las fiestas y reuniones familiares y mostró datos de movilidad de Google que demuestran que los residentes de la urbe han vuelto a las calles.
Ciudad de México acumula el 20% de los 1,2 millones de casos de coronavirus que tiene México. El contiguo Estado de México, por su parte, suma el 10% de las infecciones de todo el país.
Sheinbaum pidió cumplir con cinco reglas para “cortar la curva de contagios”: salir de casa solo si es indispensable y hacerlo siempre con cubrebocas y guardando una distancia segura, que las compras las realice solo un miembro de familia y que no se realicen fiestas con motivo de las celebraciones navideñas.
López Obrador y Sheinbaum, han rechazado tomar medidas coercitivas como un toque de queda, argumentando que la población es suficientemente responsable para cuidarse. México es el cuarto país del mundo con más muertes asociadas al COVID-19 con 112,326.
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