La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) investigará el caso de Victoria Esperanza Salazar, originaria de El Salvador, quien murió al ser sometida por policías de Tulum, Quintana Roo.
“La presidenta de la CNDH, Rosario Piedra Ibarra, acordó la radicación de oficio y atracción del caso de una mujer, de nacionalidad salvadoreña, que murió al ser sometida por elementos de la Dirección Municipal de Seguridad Pública de Tulum, Quintana Roo”, indicó el ente en un boletín.
Ello “ante los presuntos hechos violatorios de derechos humanos que fueron difundidos en medios de comunicación en días pasados”, dijo la CNDH, que calificó los hechos de “lamentables”.
Los hechos ocurridos la tarde del sábado 27 de marzo ameritaron la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Quintana Roo por probable uso excesivo de la fuerza.
Por estos hechos, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo inició también una investigación, añadió la Comisión.
“La CNDH integrará el expediente de queja respectivo y, en su momento, emitirá el pronunciamiento que conforme a derecho corresponda”, indicó el organismo.
El ente de derechos humanos explicó que atrae el caso porque es un asunto de interés “nacional” y con “la finalidad de investigar posibles actos u omisiones cometidos por parte de servidores públicos del Ayuntamiento de Tulum, Quintana Roo, así como de la Fiscalía General de Justicia de ese estado, que por su naturaleza pudieran resultar de especial gravedad y constituir violaciones a los derechos humanos”.
El acuerdo para atraer el caso ya fue notificado a la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Quintana Roo, a la Fiscalía General de Quintana Roo y la Dirección Municipal de Seguridad Pública en Tulum, Quintana Roo.
Victoria Esperanza Salazar, de 36 años y residente en México con visa humanitaria desde 2018, fue asesinada por cuatro policías del municipio de Tulum, enclave turístico de Quintana Roo, que ya están procesados por feminicidio.
El deceso de Victoria, grabado en video el sábado, ha despertado protestas de organismo internacionales y grupos que acusan a las fuerzas de seguridad mexicanas de racismo y misoginia, además de reclamos de El Salvador.
Varia agencias de la ONU, como la OIM, Acnur o la ONU-DH, condenaron este martes el asesinato de la mujer y pidieron a las autoridades una investigación “pronta e imparcial”.