La principal embotelladora de Coca Cola en todo el mundo reportó que este incremento en su utilidad fue impulsado por una disminución en los gastos financieros durante el trimestre.
Muchos son los factores que pueden inferir en un escenario en el que las ventas disminuyen pero las utilidades crecen, en un escenario que planteó el nuevo paradigma debido a la pandemia, no extraña que las empresas se comporten de tal manera. Esta vez fue el turno de Coca-Cola y su principal embotelladora Femsa, que tras un primer trimestre que aún se antojaba caótico debido a los semáforos epidemiológicos, ya muestra al menos en lo a utilidades respecta, un movimiento positivo.
Al primer trimestre del 2021, Coca-Cola FEMSA reportó ingresos por 44,690 millones de pesos, 658 millones menos que lo registrado en el mismo periodo del año previo, con 45,348 millones de pesos, lo que representa una caída de 1.5 por ciento.
“La disminución en los ingresos fue impulsada principalmente por el efecto negativo de conversión por la depreciación del real brasileño, el peso argentino y el peso uruguayo en comparación con el peso mexicano, un efecto que fue parcialmente compensado por iniciativas de precio en nuestros mercados clave”, comentó la firma en su reporte a la Bolsa Mexicana de Valores.
En la otra cara de la moneda, el aumento de las ganancias de la embotelladora mexicana se atribuye a una disminución en los gastos financieros durante el periodo con un gasto por intereses no recurrente relacionado al prepago de deuda en el primer trimestre del año pasado, de acuerdo con el reporte enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
Durante el trimestre, la empresa registró un aumento en el costo de la materia prima debido al tipo de cambio, además de mayores costos de concentrado en México.
Otras empresas han mostrado este mismo comportamiento viendo una merma en ganancias netas pero aumentando sus utilidades. Pareciera que es un comportamiento común en este periodo que podríamos denominar como postpandemia y aunque es cierto que la enfermedad sigue cobrando vidas en nuestro país y lo ancho y largo del globo, también es cierto que tras este periodo de incertidumbre las compañías han replanteado su organización de manera que impulsando sus e-commerce y alternando con otras estrategias han conseguido paliar moderadamente la pandemia.
La recuperación se antoja lenta, pero basta ver los reportes del primer trimestre de 2021, para notar cómo los resultados comienzan a llegar para las compañías. Mientras algunas como los minoristas y aerolíneas no pueden aún cantar victoria y reportar números sanos, hay otro importante sector que muestra crecimiento al menos en cuanto a utilidades respecta.
Los efectos de la pandemia del COVID-19 tendrán un impacto económico y social que será difícil revertir en los próximos años y que sin duda será algo que se recordará por generaciones futuras. Todavía es muy pronto para definir cómo será el desenlace de la contingencia ocasionada por el COVID, pero definitivamente su llegada se ha hecho sentir en el mundo empresarial. La mayoría de empresas se han visto perjudicadas por él, siendo tan solo algunas cuantas las que se han visto beneficiadas por la situación. Coca-Cola junto a Femsa, ni con todo su impresionante poderío ha salido bien librada, sólo resta espera par conocer en los próximos años si se tomaron las decisiones adecuadas.
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