
No fue el temido dos a cero, pero casi. La MLS se llevó el triunfo 2-1 sobre la Liga MX en el tradicional Juego de Estrellas. Un gol tempranero de Carlos Vela y un penal de Raúl Ruidíaz le bastaron a la competición estadounidense para conseguir la victoria y dar un nuevo golpe sobre la mesa en contra del futbol mexicano, que desde hace tiempo no ve la suya con los vecinos del norte, en cualquier competición.
El equipo de la MLS sorprendió a la Liga MX apenas en el arranque. No habían pasado ni tres minutos en el Allianz Field de Minnesota cuando el representativo estadounidense encontró el gol. Lo hizo en una jugada por la banda izquierda que contó con un gran centro de Palacios al movimiento de Carlos Vela.
El delantero mexicano se desmarcó con un ligero movimiento hacia atrás y remató de cabeza al filo del área chica. El balón salió con potencia para vencer a Camilo Vargas, que nada pudo hacer para evitar la caída de su marco.
El gol tempranero de alguna manera motivó a la Liga MX a buscar el empate de inmediato. La constelación de estrellas del torneo mexicano poco a poco comenzaron a entenderse para generar peligro en la meta rival. Juan Escobar, últimamente utilizado como central en la Máquina, recordó sus tiempos por la banda derecha y pronto se convirtió en la mejor vía de ataque.
Fueron sus idas hacia el frente el mejor recurso de la Liga MX durante la primera, de sus pies salió un buen centro que cerca estuvo de encontrar a Julio Furch, pero el balón quedó apenas largo. Minutos más tarde, un nuevo tiro centro del paraguayo amenazó con la igualada, pero todo quedó en eso.
El equipo mexicano fue amplio dominador de las acciones, sin embargo, la falta de contundencia le pasó factura, al no poder concretar sus oportunidades. Una de las más claras se dio a la media hora de juego, con un disparo dentro del área por parte del “Nene” Beltrán que se fue encima. En la recta final del primer tiempo, Dinenno, recién ingresado, también estuvo a punto del empate con un buen cabezazo que rechazó el arquero.