El regreso de las concertaceciones
AMLO y Marko Cortés repiten en modo región 4T la versión de las concertacesiones protagonizadas en su tiempo por Carlos Salinas de Gortari, Manuel Bartlett y Manuel Camacho Solís, con el PAN de Santiago Creel, Diego Fernández de Cevallos y Luis H. Álvarez.
Para nadie es un secreto que Marko Cortés, aparte de entregarle el PAN al compañero presidente, se ha encargado de hundir al partido que se encuentra en su versión más entreguista al poder, que ha perdido principios, agenda y posiciones políticas en estados donde gozaba de una presencia mayoritaria.
Afortunadamente los tiempos son diferentes, ya Manuel Bartlett no es el responsable de decidir los procesos electorales ni lo que sucede al interior de los partidos.
El PAN y la ilegalidad
Adriana Dávila, quien contendiera por la presidencia nacional del PAN en las anteriores elecciones internas, no ha quitado el dedo del renglón, impugnó ante la Sala Superior del TEPJF la decisión por la que se negó la existencia del uso indebido de la pauta para colocar promocionales en los tiempos oficiales de radio y televisión. La tlaxcalteca junto con Gerardo Priego han demostrado que Marko cometió diversas “ilegalidades” en el proceso, desde “la cooptación de miembros, hasta la brutal manipulación y desfiguración del padrón, pasando por la falsificación de firmas”.
El proceso lleva ya meses de trabajo, la primera queja la presentó Gerardo Priego el pasado 27 de septiembre y fue respaldada por el TEPJF el 6 de octubre, cuando ordenó una investigación que fue desechada el 5 de noviembre por la Comisión de Justicia del PAN, que determinó que no hubo irregularidades.
Un mes después, gracias a la impugnación de Dávila, se reabrirá la investigación que podría provocar la caída del líder blanquiazul y ampliar las fracturas existentes dentro del partido.
La gestión de Cortés inició en 2018 y ha llevado al PAN al fracaso absoluto, concertacesionando con AMLO el partido, gubernaturas, presidencias municipales y posiciones en el Congreso Federal y en los locales.
El PAN ya pasó por ahí, basta recordar cuando hacían y deshacían con el partido para fortalecer al presidente Salinas. Así lo hace hoy Marko Cortés, traicionando a la militancia del PAN, dejando sin apoyo a sus legisladores y gobernadores, pero, quienes se alinean, son premiados con puestos en la administración lopezobradorista.
El fracaso y la nula dignidad de no renunciar
Bajo la dirigencia de Marko Cortés, el blanquiazul ha tenido los peores resultados no solo en lo electoral, donde perdió dos gubernaturas, sino en su manejo político, la bancada panista del Senado perdió senadores que prefirieron salirse del PAN antes de seguir bajo la dirigencia de Cortés, también se ha enfrentado al gobernador Martín Orozco y los gobernadores Mauricio Vila y Maru Campos han preferido tomar distancia de él.
Las concertaciones históricamente han perjudicado a la democracia y al PAN en beneficio del partido en el poder. Los propios panistas reconocieron que eso sucedía en la época de Salinas y ahora pareciera que el modelo se repite:
El ex panista Jesús González Schmal confirmó la existencia de acuerdos, cuando se dio cuenta de que se realizaban componendas sin consultar al partido. “Sabíamos que Álvarez, Carlos Castillo Peraza y otros se comunicaban continuamente y tenían juntas secretas con Salinas y Bartlett”.
El exsenador y expresidente municipal de Ensenada, Ernesto Ruffo Appel, señaló que, aunque no puede asegurar que hubo fraude contra Cárdenas, sí “hubo algo turbio”. Refirió que fue testigo de un trajín, con idas y venidas de Luis H. Álvarez a Los Pinos, llevado por Diego Fernández de Cevallos, para entrevistarse con Carlos Salinas. “Y lo que vi fue que don Luis y Fernández de Cevallos se la vivían en reuniones privadas con Salinas de Gortari, quien tenía una oficina en Los Pinos, donde despachaba. En el Consejo Político estábamos perplejos, no entendíamos y el Maquío, quien estaba muy molesto, se fue a la huelga de hambre con Cárdenas.”
Salinas tuvo que “armar” estas concertacesiones por una simple razón, llegó a la presidencia de la República bajo la sospecha de un gran fraude electoral donde Manuel J. Clouthier y Cuauhtémoc Cárdenas representaron un fenómeno nunca visto en los 70 años en que había gobernado el PRI sin oposición, entonces, para legitimar su arribo a la presidencia, le “cedió” al PAN las gubernaturas de Baja California, Guanajuato y Chihuahua.
En el PAN de Marko las cosas no son tan distintas, en la elección intermedia de 2021 el partido tenía y tiene aún, la suficiente capacidad de convocatoria para consolidarse como un verdadero partido de oposición en la escena política nacional, sin embargo, Marko ha decidido otorgarle a AMLO todo el poder y abrir avenidas para Morena.
Destruir no sumar
Esto se puede ver en Aguascalientes, donde Marko pretende imponer a un candidato de poca monta que ampliaría la posibilidad detriunfo para Morena. Lo mismo pasó en Nayarit, con Antonio Echeverría García, quien salió de las filas del PAN y dejó al estado con una aceptación para el blanquiazul de poco más del 2%, en peligro de perder el registro si no se hace algo, pero eso sí, el exgobernador ya se integró a las filas de la 4T y se convertirá en representante diplomático.
Otro de los orquestadores de las concertacesiones con Salinas, repite el numerito con la 4T. Santiago Creel, que se reunió con el secretario de Gobernación y anunció que la próxima semana se volverán a reunir para revisar temas de seguridad, economía y salud, esta vez con el líder nacional del PAN, Marko Cortés y gobernadores panistas.
¿Qué será lo que verdaderamente están negociando en los sótanos de la Secretaría de Gobernación?
Esperemos que por el bien de México, del PAN y de la democracia, el Tribunal de cause a la demanda interpuesta por la exdiputada Adriana Dávila.