El gobierno de Andrés Manuel López Obrador propone destinar, el próximo año, 9,054 millones de pesos a la atención de los desastres naturales, de acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de Egresos (PPEF) del 2022.
La propuesta que entregó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) es que, al interior del Ramo 23 “Provisiones Salariales y Económicas”, a través del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) se destinen estos recursos a la atención de emergencias causadas por desastres naturales, apenas 0.5% mayor a lo que se aprobó para este año.
El monto propuesto representa 13.6% de los recursos totales que se proponen destinar a la adaptación y mitigación de los efectos del cambio climático, de 66,542 millones de pesos.
“Ante las contingencias económicas enfrentadas como consecuencia de la materialización de eventos catastróficos, el Gobierno Federal y las entidades federativas contarán con los recursos del Programa presupuestario Fonden” se lee en los Criterios Generales de Política Económica (CGPE) 2022.
Con estos recursos, se podrá apoyar a la población que se vea afectada por estos fenómenos naturales, así como a la restitución y salvaguarda de la infraestructura pública, principalmente de cinco sectores prioritarios, que son educación, salud, carretera, hidráulica y vivienda en pobreza patrimonial, de acuerdo con Hacienda.
Si bien la extinción del Fonden se dio desde el 30 de junio pasado, Gabriel Casillas, presidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del IMEF, señaló que esto no quiere decir que se dejen de atender las emergencias causadas por estos fenómenos naturales, por lo que el gobierno continúa presupuestando recursos para este objetivo.
En este sentido, James Salazar, subdirector de Análisis Económico de CIBanco, indicó que no existen reglas o lineamientos específicos que expliquen el cómo se van a usar estos recursos en caso de una emergencia, por lo cual su uso podría ser discrecional.
“Estos recursos estarán ahí para reaccionar en caso de una catástrofe, pero Hacienda no ha dicho cómo serían las reglas de operación o cómo se asignarían los recursos. No es que se haya revivido el fideicomiso, los recursos seguirán para atender los impactos de estos desastres”, agregó.
Hace unos días, en su comparecencia ante el Senado de la República, Rogelio Ramírez de la O, secretario de Hacienda, fue cuestionado sobre cómo se atenderían a las personas afectadas por inundaciones y sismos recientes, a lo que él contesto que los recursos están asegurados a través del Fonden y que la dependencia está en labores para actualizar la normativa que se le aplica.
En el caso del Fondo para la Prevención de Desastres Naturales (Fopreden), se propone un presupuesto de 207.5 millones de pesos, lo que apenas es mayor en 0.5% respecto a lo aprobado en el PEF 2021.
Proyección de daños
Al interior de los CGPE 2022, el gobierno resaltó la exposición del país a los desastres naturales de gran magnitud, como lo son sismos, inundaciones, huracanes y similares, por lo que en las últimas dos décadas se ha desarrollado una “estrategia para gestionar adecuadamente el impacto fiscal”.
En este sentido, estimó que para eventos de alta frecuencia y baja intensidad, las pérdidas estimadas para el siguiente año son de 9,600 millones de pesos, mientras que para aquellos eventos que tienen 5% de probabilidad de ocurrir, las pérdidas serían por 10,700 millones de pesos.
En el caso de eventos con 1% de probabilidad de ocurrencia por año, la perdida esperada asciende a 32,200 millones de pesos.
“Estas estimaciones sustentan técnicamente la estrategia para gestionar adecuadamente el impacto fiscal de los desastres naturales, que consta de mecanismos presupuestales institucionalizados, de transferencia de riesgos a los mercados especializados (seguros, bonos catastróficos, cautivas, créditos contingentes catastróficos)”, indicó Hacienda.
Otros instrumentos
Además de los recursos contemplados en el Fonden, la Secretaría de Hacienda contrató el Seguro Catastrófico, con vigencia del 5 de julio del 2021 al 5 de julio del siguiente año. La cobertura es por hasta 5,000 millones de pesos, y se activa ante desastres naturales que superen un nivel mínimo de daños de 275 millones de pesos, y un acumulable de 750 millones.
“En caso de que se materialice algún siniestro, el seguro cubriría el riesgo de una reducción en los recursos presupuestales con motivo de la atención que se debe dar a los efectos ocasionados por los fenómenos naturales perturbadores”, indicó Hacienda.
Además, se cuenta con un Bono Catastrófico por 485 millones de dólares, el cual es contra pérdidas derivadas de sismos y ciclones tropicales, con una vigencia hasta marzo del 2024.