Vaya respuesta presidencial:
“Que nos esperen hasta que nos toque a todos”, dijo López Obrador refiriéndose a la vacunación anticovid del personal de salud que trabaja en el sector privado.
Del sector público o privado los médicos, enfermeras, enfermeros, personal sanitario y un largo etcétera se la han rifado por nosotros, no veo la diferencia entre trabajar para un hospital “fifí” o uno rural. El bicho no respeta clases sociales.
Que alguien le explique al presidente que son muchos los fallecidos también en el sector privado y que ellos no tienen en ocasiones seguridad social para dejar a la familia con una pensión que les permita medio vivir y que si se enferman deben costear sus gastos y sabemos que estamos hablando de varios miles (o millones) de pesos.
Cuando nos toque a todos puede ser demasiado tarde. Abusado, señor.
Y quien no se esperó “que le toque” para levantar la voz fue el mayor del clan Yunes, el ex gobernador Miguel Ángel, quien al estar de nuevo en el ojo del huracán por una supuesta investigación que la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido) tiene contra él por enriquecimiento ilícito dijo que estaba “a la orden” para ser investigado, ya que no tiene nada que ocultar.
A Yunes Linares se le ha acusado de todo, hasta de estar al frente de una red de pederastia pero él anda tan campante corriendo y haciendo ejercicio en el bule que hasta casi le creemos que es inocente.
“Son tiempos de zopilotes”, dice. A ver cómo se desarrolla esta nueva trama de la telenovela que implica al ex gobernador y a varios personajes más.
Tiempos de zopilotes de “víboras prietas”, dijera el clásico, pero los golpes y acusaciones salen por todos lados en estos tiempos electorales.
Y mire el tamaño de las cosas que las Brujas del Mar sacaron la lista negra de los políticos malandros que han tenido en su haber acusaciones de maltrato, violación, abuso a menores, pornografía y cuanta atrocidad se le ocurra a usted mencionar y que ahora quieren andar en campaña detrás del hueso, pregonando que son los defensores de las mujeres, de la equidad de género, de los adultos mayores, en fin,la buena onda.
En la lista figuran cualquier tipo de personajes, desde aquellos que andan tras un huesito menor hasta quienes ya ocupan un puesto en el senado o en la cámara baja.
Tantita vergüenza, digo, y lo peor es que muchos van a votar por ellos y más si les dan una Tarjeta de Bienestar, una despensa (aunque sea frijol con gorgojo, cuando hace hambre viene bien)
Ya en estos tiempos es difícil ocultarse, con tanta información que circula,
Bien decía mi abuela: “O andas derechita o mejor no caminas” porque tarde que temprano la verdad sale a luz.
Me imagino que a muchos hasta el sueño se les fue y ya hasta tiraron el celular donde guardan fotos comprometedoras, no vaya a ser el diablo.
Me voy pero le cuento de prisa este chisme.
Estaba uno de los rimbombantes aspirantes a un huesito menor chateando medio acaloradamente ( y no por las méndigas temperaturas que hemos tenido en Veracruz) con una jovencita y le decía:
“Es que me acuerdo mucho de tus piernas, tan lindas, que me excitaban tanto cuando estábamos en el auto…”
“¡Jesús, María y José!”, le dice ella.
“No, no tantos, solo estábamos los dos….”.
El que entendió, entendió. Ha de ser la primavera, ¿o qué opina usted?
Mejor corra a ver qué tiene en el celular, sugiero.