De acuerdo con la directora
del Servicio de Administración Tributaria (SAT) Raquel Buenrostro, se detectó a
un grupo de empresas que se dedican a importar combustible ilegal al país,
principalmente por los puertos del Golfo de México.
Las embarcaciones que llegan a
entregar combustible presentan documentos con domicilios falsos en el país o,
en su mayoría con domicilios fiscales de Estados Unidos.
Señaló que hubo una situación
excepcional de una embarcación que intentó entregar, en siete ocasiones,
documentación falsa para dejar combustible en el puerto de Tuxpan, Veracruz;
sin embargo, como fue descubierto, regresó a mar abierto, cruzó por el Canal de
Panamá al Pacífico y volvió a intentar importar el cargamento, pero ahora por
el puerto de Lázaro Cárdenas, en Michoacán.
Para frenar esta práctica tuvo
que intervenir el gobierno de Estados Unidos para confirmar que las facturas de
las embarcaciones eran falsas, e incluso, que tenían domicilios fiscales
falsos.
“Cuando se pidió información e
intercambio con el gobierno de Estados Unidos las facturas que presentaban las
embarcaciones eran falsas, el producto no se acreditaba que había sido
adquirido en el extranjero, los volúmenes eran distintos o quisieron presentar
facturas que correspondían a compras hechas en otras fechas y por empresas
diferentes, pero se usaban datos fiscales de esas otras empresas”.