La disfunción eréctil es la disfunción más estudiada ya que tiene unas grandes repercusiones en la calidad de vida del hombre. Consiste en una dificultad persistente y recurrente para obtener y/o mantener una erección, o una reducción marcada de la erección en presencia de una estimulación sexual adecuada.
La disfunción eréctil, aunque es más frecuente en hombres mayores, cada vez está afectando más a personas jóvenes, siendo su prevalencia un 20% en edades comprendidas entre los 25 a 70 años.
LaDisfunción eréctil afecta aproximadamente a un 50% de los pacientes entre 40 y 70 años, y a nivel europeo, con variación de subgrupos, llega al 30% de los varones. Dicha disfunción eréctil está relacionada con la edad, alteraciones hormonales, enfermedades, toma de medicación, estado emocional…
¿Afecta a gente joven? A pesar de estar relacionado claramente con la edad, también afecta a jóvenes, y es que hasta un 22% de jóvenes por debajo de 40 años, presentaran un grado leve de disfunción eréctil, requiriendo de una ayuda puntualmente. Lo más habitual, serán alteraciones de origen psicológico, estrés de trabajo, problemas de base con la pareja, etc…
Se conoce que, a pesar de poder llegar hasta el 50%, muchos pacientes evitan hablar de sus problemas sexuales. La asociación entre erección y ansiedad es bidireccional, y es creciente, llevando finalmente a la pérdida de la autoconfianza sexual, generando miedos a futuros encuentros sexuales. Los estudios hablan de que cerca del 70 % de los varones niegan la existencia de su DE, y la media de espera a iniciar tratamiento para la DE es mayor a los 2 años. Incluso una vez con tratamiento, los pacientes siguen con tendencia a evitar relaciones futuras.
El diagnóstico y evaluación de la disfunción eréctil debe ser llevada por un equipo multidisciplinar. Y es que, la esfera sexual puede alterar muchos campos, en las que además de una alteración orgánica. La indicación y uso de la medicación ha de ser individualizada para cada caso.
Los fármacos de mayor uso son los llamados Inhibidores de la fosfodiesterasa 5 ( IPDE 5) y el efecto , a grandes rasgos, consiste en evitar la degradación de una moléculas que permite una mayor vasodilatación. De esa manera, el vasodilatador se mantiene más tiempo activo, y consecuentemente, mejora la llegada de sangre, promoviendo y perpetuando la erección. Dichos receptores de este fármaco se encontrarán en la musculatura lisa, el corazón, la retina, etc…