José Luis Camacho Acevedo
Es previsible que después de
la salida del jefe de la Oficina para la Presidencia del gobierno de Andrés Manuel
López Obrador, en breve se anuncien más cambios en el gabinete. Después de un
año tan complicado como el 2020, es necesario un ajuste de tuercas y algunos
enroques que ayuden al mandatario a consolidad la Cuarta Transformación.
Así lo anunció el periodista Federico
Arreola en su columna,
en la cual afirmó que amigos “que presumen de estar informados”, le enviaron
con insistencia el mismo mensaje de WhatsApp: “Viernes, más movimientos en el
gabinete de AMLO”.
En lo cual coincido puesto que
recibí los mismos comunicados, aunque no estoy tan seguro de que estos cambios se
lleven a cabo este viernes, considero que podrían darse con mayor probabilidad a
principios de 2021, pero como el mismo Federico señala, a los rumores no deben
ser tomados con total seriedad.
Por supuesto que la duda más
latente e importante es: ¿Quiénes serán los próximos en irse y quienes llegan
al relevo?
Uno de los nombres que más se
ha mencionado es el del Manuel Bartlett, presidente de la Comisión Federal de
Electricidad, ya que no son pocos los escándalos que ha protagonizado él (con
sus propiedades), así como su hijo (con millonarios contratos con el IMSS).
Pero no sólo eso, también esta
la gestión del funcionario en la CFE que ha provocado encontronazos con algunos
gobernadores por sus polémicas decisiones y administración, la ultima con el
mandatario de Tabasco, Adán Augusto López, y recientemente Senado pretende que
Bartlett comparezca para abordar el tema de la contaminación que genera la
Central carboeléctrica en Petacalco, Guerrero, y que afecta la salud de cientos
de personas de la zona.
Lo que si es un hecho es que
el tabasqueño siempre esta pensando que ajustes hacer para consolidad sus
proyectos, los cambios podrían venir de las secretarías que menos resultados han
obtenido en estos 24 meses o que mayores dolores de cabeza han provocado.
Sin embargo, también están los
inamovibles y por varias razones, aunque una de las más importantes es la
siguiente: el presidente valora la
lealtad ante cualquier circunstancia y no está dispuesto a sacrificar a sus más
cercanos colaboradores, menos ante los chantajes mediáticos.
Por ende, es muy probable que
sigan en sus cargos: la implacable Irma Eréndira Sandoval, titular de la
Secretaría de la Función Pública; la ecuánime secretaria de Gobernación, Olga Sánchez
Cordero; el super eficiente canciller Marcelo Ebrard; o el precavido secretario
de Educación, Esteban Moctezuma.
Es cuestión de días para
conocer cual de todos los rumores era el correcto o sí como acostumbra López
Obrador nos sorprende como la salida de Alfonso Romo.
EN TIEMPO REAL
1.- Preocupa el aumento de la
ocupación hospitalaria en la Ciudad de México, que este viernes rebasa el 56%, lo
cual es una de las variantes para que la capital del país regrese a semáforo rojo,
sin embargo, dicha medida sería mortal para la economía, es por ello por lo que
el Gobierno de Claudia Sheinbaum dará a conocer este viernes, nuevas medidas
para tratar de controlar la pandemia.
2.- El secretario General
Ejecutivo de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de
Educación Superior (ANUIES), Jaime Valls Esponda, expresó ante diputados y el
auditor Superior de la Federación, David Colmenares Páramo, la gran preocupación
que existe por la disminución de presupuesto destinado a la educación superior.
Lo anterior es grave, pues las
universidades son el pilar para el desarrollo de la educación en nuestro país,
pero también es cierto que, durante años, algunas han contribuido ha desfalcar
las arcas públicas, tal y como quedo comprobado con la investigación de la
Estafa Maestra.
3.- La secretaria de
Gobernación, Olga Sánchez Cordero, reconoció que, aunque no existe evidencia
contundente sobre el impacto de la despenalización de la producción y comercialización
de la mariguana en los índices de violencia delictiva, lo que sí ocurrirá una
vez que se apruebe la iniciativa de ley que se discute en el Congreso de la
Unión, es que la regulación beneficiará directamente a trabajadores del campo
que hoy son amenazados por los grupos del narcotráfico para producir drogas
ilegales.