Con la Navidad y el Año Nuevo ya en el horizonte, los consumidores van planificando la que tradicionalmente es una época de grandes gastos, especialmente este año en el que la escalada de precios ha pegado a los bolsillos de los mexicanos.

Según el estudio El costo real de la Navidad alrededor del mundo, realizado por WorldRemit, empresa líder de pagos transfronterizos, los hogares mexicanos están entre los más afectados, de 14 países observados, por la disparidad entre el ingreso familiar promedio y los costos de las celebraciones navideñas, pues gastarán 148 por ciento de sus ingresos mensuales en estas fechas.

Entre decoraciones, regalos y comida, el gasto es de aproximadamente 19 mil 538 pesos (957 dólares) por familia en México. Los gastos incluyen un promedio de 4 mil pesos en comida; 6 mil 900 pesos en decoraciones y 8 mil 600 en regalos.

En la región las festividades comienzan a mediados de diciembre y se extienden hasta la víspera del Día de Reyes en enero. Sin las remesas, celebrar la Navidad sería casi imposible para millones de familias mexicanas.

“La Navidad es la época del año más activa para los envíos digitales de dinero porque es la manera de quienes viven lejos de sus países de mostrar su cariño por sus familiares y amigos. En el caso de México, siendo el primer país receptor de remesas de Latinoamérica, son un aproximado de 7 millones de hogares los que dependen de los envíos de dinero del exterior para sufragar sus gastos”, aseguró Jorge Godínez, director para Latinoamérica de WorldRemit.

El directivo de la firma de envíos destacó que de los 14 países observados que normalmente reciben remesas, 10 gastaron más de 50 por ciento de sus ingresos familiares mensuales en la temporada navideña. Unas fiestas que serían imposibles sin las remesas, donde solo en esta temporada, los mercados de envío más grandes del mundo generalmente se gastan menos de 3 por ciento de sus ingresos anuales.

El efecto de las remesas

El año pasado estuvo lleno de sorpresas, ante la pandemia, rápidamente el gobierno de Estados Unidos puso en marcha una serie de programas de apoyos a empresas y transferencias directas a trabajadores, para tratar de paliar una crisis que a todas luces sería de empleo.

Aún con el récord en la recepción de remesas que se tuvo en 2020, con 33 mil 560 millones de dólares, 2021 lo está dejando atrás, rebasando los 42 mil millones.