Ni hubo dinero por parte de Odebrecht para la campaña de
Enrique Peña Nieto, ni hubo sobornos para que los legisladores aprobaran la
reforma energética, ni hubo pagos para obtener contratos para una planta de
etano en el gobierno de Felipe Calderón, aseguró Meneses Weyll a través de su
abogado, Carlos Kauffmann.
“El único que sabe lo que hizo con el dinero es el propio
Lozoya (...) está tratando de adjudicarle pagos ajenos a Odebrecht, pagos que
no son de Odebrecht (...) Si alguien está intentando colocar en Weyll o en
Odebrecht pagos que no se realizaron, eso nosotros no lo vamos a admitir”, dijo
Kauffmann en la primera entrevista que concede a la prensa mexicana.
Luego de ser extraditado a México en julio pasado, Lozoya
solicitó a la Fiscalía General de la República (FGR) la posibilidad de actuar
como un “testigo colaborador” para aportar información esencial sobre la trama
de corrupción. Con ese criterio de oportunidad, Lozoya espera ofrecer sus
confesiones a cambio de que las autoridades no ejerzan una acción penal en su
contra.
En su denuncia de 63 páginas presentada ante la FGR, Lozoya
señala supuestos sobornos de Odebrecht a legisladores, aportaciones a la campaña
de Peña Nieto, y menciona el involucramiento de funcionarios de los gobiernos
de Calderón y de Peña. Estas acusaciones son calificadas como falsedades por
parte de la defensa legal de Meneses Weyll.
Según Lozoya, cuando trabajaba en la campaña de Peña Nieto a
principios de 2012, se reunió con Meneses Weyll en la cafetería El Globo en Las
Lomas para pedirle 6 millones de dólares a nombre del propio aspirante
presidencial. “Le dije a Weyll que esa petición venía directamente del entonces
candidato Peña Nieto y que Odebrecht se vería beneficiado cuando ganara. Él me
dijo que lo veía bien”, contó Lozoya.
Lozoya proporcionó más detalles: Meneses Weyll le respondió
que Odebrecht aportaría cuatro millones de dólares, de los cuales 2.5 millones
serían íntegros para la campaña de Peña, con lo que la firma brasileña esperaba
posicionarse con el PRI. Lozoya le dio los datos de una cuenta bancaria que
tenía en Suiza a la que fueron transferidos los depósitos entre abril y junio
de 2012.
Kauffmann negó que Meneses Weyll haya dado dinero
expresamente para financiar la campaña peñista. Según el abogado, no se
realizaron más pagos que los reportados previamente por el exjefe de Odebrecht
en México. “Luis Weyll asumió toda la responsabilidad de todos los pagos que hizo
y comprobó todos los pagos con documentos, pero él no se responsabilizará de lo
que no hizo”, dijo a Quinto Elemento Lab a través de una videoconferencia desde
Brasil.
Meneses Weyll ya había entregado a los fiscales brasileños
desde 2016 los registros que comprueban las transferencias hechas a las cuentas
de Lozoya. Pero Meneses Weyll dijo que los sobornos solo fueron para Lozoya.
“Con el pretexto de haberme auxiliado en el posicionamiento de la compañía en
Veracruz y Tula, me dijo que entendía que debía hacer un pago en su favor del
orden de cinco millones de dólares”, contó el exjefe de Odebrecht a los
fiscales brasileños.
Según el relato de Lozoya, dos encuentros claves permitieron
afianzar la relación entre el propietario de la constructora, Marcelo Odebrecht
y Luis Alberto de Meneses Weyll con Peña Nieto y Luis Videgaray. En abril de
2010, según afirmó el exdirector de Pemex, Peña Nieto viajó a Brasil como
gobernador del Estado de México y se encontró con los directivos de la compañía
brasileña.