El mariscal de campo Drew Brees, que jugó las últimas 15 temporadas con los New Orleans Saints, anunció este domingo a través de su página de Instagram el punto final a sus 20 años de carrera en la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL).
La noticia la entregó Brees un día después de cumplir 15 años de relación con los Saints. Antes militó en los Chargers de San Diego.
En un emotivo mensaje Brees manifestó que siempre lo dio todo en el campo por los Saints.
“Solo me retiro del fútbol, no me retiro de Nueva Orleans. Esto no es un adiós, sino un nuevo comienzo. ¡Ahora comienza el trabajo de mi vida real!”, destacó.
El mariscal de campo publicó un vídeo de sus hijos anunciando que su padre ahora “va a pasar más tiempo” ellos-
Los Chargers seleccionaron a Brees en la segunda ronda del sorteo de la NFL de 2001. Jugó un partido esa temporada después de pasar la mayor parte como suplente de Doug Flutie.
Su exitosa relación con los Chargers comenzó en 2002, cuando ganó la titularidad. Pero en la temporada 2006 necesitó pasar por una cirugía para reparar un labrum desgarrado en su hombro de lanzamiento. Los informes decían en ese momento que también tenía daño en el manguito rotador.
El mariscal de campo llegó a la agencia libre y recibió una oferta de cinco años de los Chargers, quienes no aumentaron sus términos mientras los Saints y los Miami Dolphins le ofrecían más dinero.
Los Dolphins, que fueron entrenados por Nick Saban en ese momento, estaban interesados, pero se retiraron de la mesa de negociaciones por preocupaciones sobre la lesión de Brees y en su lugar, el equipo eligió cambiar a Daunte Culpepper.
Culpepper solo jugó cuatro partidos con Miami esa temporada y Saban luego dejaría la NFL para llegar a entrenador a Alabama y convertirse en uno de los mejores entrenadores de fútbol americano universitario de todos los tiempos.
Brees eligió firmar con los Saints y fue mariscal de campo All-Pro y Pro Bowler en su primera temporada con ellos.
Durante la temporada del 2009, Brees llevó a los Saints al Super Bowl XLIV y derrotaron a los Indianapolis Colts 31-17. Brees completó 32 de 39 con 288 yardas aéreas y tuvo dos pases de touchdown en el partido estelar. Brees fue nombrado MVP del Super Bowl.
A pesar de liderar ofensivas del equipo año tras año, Brees y los Saints no regresarían al Super Bowl. Los Saints sufrieron innumerables angustias en los playoffs, incluso en el Campeonato de la Conferencia Nacional (NFC) del 2018, donde una llamada de interferencia de pase defensivo fallida cambió el juego y permitió a Los Angeles Rams llegar al Super Bowl.
Brees es visto como un claro miembro del Salón de la Fama cuando su nombre entre por primera vez en la lista de los candidatos a ser votados al recinto sagrado de Canton (Ohio).
El exmariscal de campo de los Saints termina su carrera primero en yardas aéreas (80 mil 358), segundo en touchdowns aéreos (571), quinto en índice de pasador (98,7), segundo en porcentaje de pases completos (68%) y tercero en remontadas en el cuarto periodo (36).
Su último partido como profesional fue el que los Saints disputaron el pasado 17 de enero contra los Buccaneers de Tampa Bay, del mariscal de campo Tom Brady, en la ronda divisional de la NFC y que perdieron en su campo del Mercedes-Benz Superdome por 20-30.
Nada más concluir el partido, Brees, acompañado de su familia, se reunió con Brady en lo que ya fue visto como la señal más clara que sus días dentro de la NFL habían llegado a su final y solo faltaba la confirmación oficial, que hizo este domingo.