José Luis Camacho Acevedo
Y no es que busquemos adorar deidades de ultramar. No, en un análisis objetivo hoy varios medios mexicanos han caído en letargo y han visto con frecuencia la forma audáz en la que el diario español da constantes muestras de ser, en ocasiones, el mejor informado en México.
Constantemente el País gana primicias en notas nacionales a los medios punteros como el financiero y el universal mexicanos.
Ahí tiene usted, por ejemplo, el resultado de la famosa auditoría del accidente del metro que supuestamente sería reservado por las autoridades de la CDMX.
Sin embargo, con sagacidad periodística, el País obtuvo esa información “reservada” y publicó, primero, una parte de esa auditoría en la señala categóricamente que la falta de mantenimiento fue la causa central del desastre.
Además, han sacado amplia ventaja a medios nacionales, que se han convertido en monotemáticos con su diaria crítica a TODO LO QUE HACE O DICE EL PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR. En cambio El País ha sustentando su capacidad informativa con investigaciones periodísticas en temas cruciales para la vida nacional como el mapa del narcotráfico en México o los verdaderos costos del tren maya.
A diferencia de esos diarios antiamlo como El Universal, El Financiero y El Reforma, existen nuevas opciones informativas como ha venido siendo el trabajo de El Heraldo diario, y en conjunto El Heraldo Media Group, que preside Ángel Mieres.
Sin duda que El Universal y El Financiero tienen en sus propuestas editoriales elementos por demás rescatables y necesarios en nuestro país tan carecte de una crítica mediática que no se agote en los fundamentalismos.
Pero insistimos en que El País ha estado poniendo la muestra en el diarismo mexicano, tanto en el periodismos de investigación como en la temática que abordan sus principales columnistas.
Ojo que no estamos hablando de un diario con experiencia centenaria como muchos de los fundados aquí. El País fue creado apenas en el 76, en plena transición española a unos cuantos meses de la muerte del general Francisco Franco, pero pronto se convirtió, por su apuesta por la democracia, en un medio de vanguardia informativa en aquel el país ibérico. Su crecimiento en España es indiscutible y el alcance internacional ha tocado con éxito países como México y Brasil.
Cito precisamente al padre del fundador del diario el País, al filósofo del movimiento del novecentismo español, Don José Ortega y Gasset: “Yo soy yo y mi circunstancia, y si no la salvo a ella no me salvo yo”. Sirva esta reflexión de alerta a los medios nacionales el recordar que somos parte del mundo y el mundo es parte de nosotros, lo que no hagamos bien aquí, inexorablemente alguien vendrá a hacerlo.
Por allí anda la cuestión.