
Los cárteles mexicanos han hecho del tráfico ilegal de vapeadores una operación estratégica, advirtieron participantes en el Foro Global de Nicotina 2025, realizado en Varsovia, Polonia.
En el encuentro, transmitido a través de redes sociales, se alertó sobre los efectos adversos del prohibicionismo en el uso de los vapeadores, como ocurre en México, donde la restricción está a nivel constitucional.
Acusaron que el prohibicionismo no detuvo el comercio de vapeadores, pero sí abrió la puerta al crimen organizado para el control del tráfico ilícito de los dispositivos, lo que representa una amenaza creciente para la seguridad regional.
“Sí, la prohibición en México está consagrada en la Constitución; sin embargo, no te darías cuenta porque los vapeadores están por todas partes”, dijo Roberto Sussman, académico de la UNAM y panelista en el foro.
Explicó que el mercado de consumo masivo, que era en cierto modo autorregulado, se ha debilitado, pero el mercado sigue existiendo y hay una enorme distribución por parte de los grupos criminales.