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El que se enoja, pierde.

por José Antonio García
12-02-2022

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El que se enoja, pierde.

Así reza el viejo dicho popular, el que se enoja pierde, es la prueba madre del comportamiento humano cuando le gana la emoción y su alma se llena de rencor contra todos.

El Presidente López Obrador, es el hombre más poderoso de este país, por lo tanto no es un ciudadano común, tiene que respetar a todos y a cada uno de los gobernados.

Lo he dicho que algunos de sus dichos y hechos rayan en lo grotesco, si esos dichos o hechos fueran palabras de un panista o priísta, no quiero ni pensar que dirían los seguidores de AMLO.

En fin que aquí el tema es que el señor ha brincado la línea y ahora se dedica a atacar a un particular cuyo oficio es el periodismo.

No es nuevo en el presidente atacar con todo a los profesionales que no comulgan con su ideología, lo mismo se lanza contra contadores, abogados, ingenieros, etc

Está enojado y no explica la onerosa vida del hijo primogénito que ha sido exhibido en sus lujos, trata de desviar la atención pública del caso.

El discurso de la pobreza franciscana ha venido en picada desde hace rato y no va a levantar vuelo, el tiempo se le agota.

La riqueza de José Ramón no tiene explicación común, está en camino hacia los tribunales de Estados Unidos, luego entonces la avalancha es de alto peligro.

Por lo tanto el discurso del padre va al suelo inevitablemente, ya no va aguantar mucho.

El rey de la vida austera en palabrería está ya semidesnudo y como faltan muchas cosas por aclarar pronto también serán exhibidas más raterías por lo que  el monarca quedará completamente desnudo.


Es la preocupación.

Ya no le alcanza la publicidad, ni los boots, ni los obsequios de dinero a los pobres.

El falso discurso ya no da mucho fruto, así iba a terminar, más temprano de lo que nos imaginamos.

AJG