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El ruso Dmitry Bivol sorprende con decisión unánime.

por Redacción
09-05-2022

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El mexicano lució irreconocible, sin el dominio acostumbrado y sin la solvencia de siempre. No pudo en una categoría grande, semipesado, ante un campeón, inteligente y firme, el ruso Dmitry Bivol, quien conserva el cinturón de la AMB. La revancha, sin embargo, queda sobre la mesa.

“En el boxeo se gana y se pierde”, dijo Canelo al final del combate; “siento que hice lo suficiente para ganar, pero perdí y hay que aceptarlo. No creo que haya sido por la diferencia del peso. Pero esto no se queda así”.

Bivol lucía intacto, como si no hubiera peleado esa misma noche.

“Soy el mejor y mantengo mis cinturones –dijo el ruso– respeto al Canelo, pero creo en mí mismo, si no crees en ti, ¿quién va a hacerlo? Sentí la pegada de Saúl, tiene velocidad y poder, pero ese fue su error: tirar sólo golpes de poder. Ha sido una gran noche en la que disfruté todo, incluso los abucheos, todo eso me dio energía”.

Canelo no pudo repetir la gesta de la división de los supermedianos, donde arrasó con la categoría. El rival inusitadamente fuerte, sorpresivamente inteligente, no se lo permitió. Seis centímetros menos de estatura que el peleador pelirrojo, dijo que no le afectaría porque está acostumbrado a lidiar con hombres más grandes. La desventaja la compensaría con la velocidad y una musculatura que cuando golpea hace daño. Pero las cosas no salieron como pensaba. Bivol recibía golpes como si se los lanzara un joven aprendiz.