Los recientes hechos de violencia registrados en el país, como lo ocurrido en Sinaloa, Guanajuato, Guerrero, Tabasco, Chiapas y Tamaulipas, son muestra de los frentes abiertos del gobierno federal en materia de delincuencia organizada.
Según el Ejecutivo, en el país hay al menos ocho grandes cárteles, dos transnacionales y seis nacionales, que generan altos índices de violencia en el país, pese al despliegue de miles de soldados, marinos y guardias nacionales.
Además, hay decenas de pequeñas organizaciones que igualmente buscan el control de territorios para actividades criminales. En 28 días del actual gobierno suman ya unos 2 mil 100 homicidios dolosos.
En Sinaloa, gobernado por el morenista Rubén Rocha Moya, por ejemplo, La Mayiza y La Chapiza, dos facciones del Cártel de Sinaloa, han ensangrentado a la entidad. Desde el 9 de septiembre pasado se declararon la guerra.