El Grupo de los Siete (G-7), que conforman Estados Unidos, Canadá, Alemania, Francia, Reino Unido, Italia y Japón, más la Unión Europea, acordaron ayer la creación de un mecanismo de coordinación para reconstruir Ucrania.

Ante la llegada del invierno, el dispositivo buscará, entre otras acciones, entregar bombas de agua, calentadores, casas-contenedores y baños portátiles, camas, mantas y tiendas de campaña, precisó la jefa de la diplomacia alemana, Annalena Baerbock, cuyo país preside el G-7.

Reiteramos nuestro compromiso inquebrantable de seguir proporcionando el apoyo financiero, humanitario, político, técnico y de defensa que Ucrania necesita para aliviar el sufrimiento de su población y defender su soberanía e integridad territorial, afirmó el comunicado del encuentro, que se realizó en la misma sala del Rathaus (ayuntamiento) de Munster, donde en 1648 se firmó el tratado de Westfalia, que rediseñó Europa.

Washington acusó que Moscú pretende congelar a los ucranios bombardeando sus centrales energéticas en vísperas del invierno.

El presidente (Vladimir) Putin parece haber decidido que si no puede tomar Ucrania por la fuerza, tratará de hacerlo congelándola hasta la sumisión, declaró el secretario de Estado estadunidense, Antony Blinken.

En semanas recientes, Rusia ha bombardeado las instalaciones energéticas de Ucrania y, según el presidente ucranio, Volodymir Zelensky, más de 4.5 millones de personas fueron privadas de electricidad antier debido a estos ataques.

En Kiev, Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional del presidente estadunidense, Joe Biden, reafirmó el apoyo de Washington a Ucrania y reconoció en una rueda de prensa que el país tiene una necesidad urgente de defensa aérea en este momento crítico.