El líder del grupo de la milicia de extrema derecha Oath Keepers ha sido acusado de conspiración sediciosa por el ataque del año pasado al Capitolio de Estados Unidos.
Stewart Rhodes está entre las 11 personas acusadas de este delito el jueves. Fue arrestado en su casa en Texas, según su abogado.
Esta es la primera vez que se aplica el cargo de sedición por el asalto del 6 de enero de 2021.
Ese día los partidarios del expresidente Donald Trump irrumpieron en el Congreso cuando este se reunía para certificar la victoria de Joe Biden en las presidenciales de 2020.
Más de 725 personas han sido arrestadas por el ataque, que conmocionó al mundo.
Rhodes, un exparacaidista del ejército de EE.UU. de 56 años y abogado educado en Yale, está acusado de conspirar con otros para "oponerse por la fuerza a la ejecución de las leyes que rigen la transferencia del poder presidencial".
El cargo de sedición se define como intentar "derrocar, sofocar o destruir por la fuerza al gobierno de Estados Unidos".
El Departamento de Justicia acusa a Rhodes de trabajar con otros miembros de Oath Keepers (Guardianes del Juramento), una milicia que cree que el gobierno de EE.UU. ha sido corrompido por las élites, para transportar armas y municiones a Washington D.C. en su esfuerzo por bloquear la presidencia de Biden.
Los fiscales dicen que a fines de diciembre de 2020, Rhodes usó comunicaciones encriptadas para planear el ataque al Congreso, aunque él mismo nunca entró al edificio.
Se le acusa de crear varios equipos de "fuerzas de reacción rápida", que "planeaban usar las armas de fuego en apoyo a su complot para detener la transferencia legal del poder presidencial".
Los fisclaes alegan que Rhodes dividió a los miembros de las milicias en diferentes grupos, que ingresaron al Capitolio vestidos con equipos antidisturbios y tácticos.
El primer grupo se separó después de ingresar al edificio y se dirigió por separado a las dos cámaras del Congreso, mientras que un segundo grupo se enfrentó a agentes policiales en la Rotonda del Capitolio, según los fiscales.
Rhodes ha dicho en entrevistas previas con grupos conservadores que los milicianos que ingresaron al Capitolio se "separaron de la misión" y no estaban actuando bajo sus órdenes.
Edward Vallejo, de 63 años, de Phoenix, Arizona, también fue arrestado el jueves. Los otros acusados de conspiración sediciosa ya enfrentaban cargos penales separados en relación con el ataque.
Los abogados de varios de los acusados han argumentado que estuvieron presentes en el Capitolio para brindar seguridad a conservadores de alto perfil, incluido Roger Stone, un aliado de Trump, a quien indultó en los últimos días de su mandato.
Los cargos de sedición son excepcionalmente raros en la historia moderna de EE.UU. y los fiscales federales los aplicaron por última vez a una milicia de Michigan en 2010.