ALITO hunde al PRI

Triste el evento donde el presidente del PRI, Ramiro Hernández entregó la constancia que acredita a los próximos diputados del congreso local.  La mini representación del priismo jalisciense de 5 diputados, ninguno de mayoría relativa, es claro ejemplo de la descomposición que enfrenta el partido tricolor y que se viene acentuando con las erráticas decisiones tomadas por Alejandro Moreno

Alito, ha sido un pésimo presidente para los priistas de Jalisco. Traicionando a sus compromisos, su dirigencia a dejado en estado de coma al PRI Jalisco. Ha sido totalmente omiso e indolente a las necesidades de su militancia en la entidad. Prometiendo visitar a cada uno de los municipios, estar constantemente en Jalisco para reconstruir la vida del partido, todo ha sido, exactamente, al contrario. 

 Cuatro, de las cinco diputaciones locales, fueron impuestas fría y autoritariamente por Alito, dejando de lado a los liderazgos de base que habían recorrido y creado estructura en sus respectivos distritos. Esa es una de las razones por las cuales el PRI no ganó ninguna diputación por el principio de mayoría relativa. Hortensia Noroña, Hugo Contreras, Verónica Flores y Julio Cesar Covarrubias, llegan a la máxima tribuna con el único merito del dedazo de Alejandro Moreno. 

Sin representatividad social, incapaces de construir una agenda legislativa que beneficie a los jaliscienses, enfrentados unos contra otros, los próximos diputados locales estarán solo cuidando los intereses de su líder Alito y seguir fielmente sus instrucciones, instrucciones que estaremos ciertos seguirán hundiendo en el descredito al PRI que parece vivir una larga agonía. 

Ojo con el diputado

En medio de la creciente polémica que hemos venido documentando en torno a la critica situación financiera de pensiones del estado y que tienen que ver con  las pensiones doradas de algunos privilegiados exfuncionarios, de las malas decisiones de inversión de los ahorros de los pensionados, del desorden administrativo, de los resultados actuariales que ponen en riesgo la viabilidad del Instituto de Pensiones del Estado, no duden que el nombre del flamante diputado local del PRI, Julio Cesar Covarrubias, impuesto por Alejandro Moreno, aparezca envuelto en escándalos derivados de su paso por la mencionada institución. 

Julio César Covarrubias ocupó el sitio en la lista local de diputados plurinominales que le correspondía al líder estatal de la Red de Jóvenes por México, Juan José Cedillo; sin embargo, por obra y gracia de Alejandro Moreno, se desconoció el trabajo del “Chino Cedillo” y se impuso al desconocido Julio César Covarrubias. 

Lo anterior provocó que durante la pasada campaña los jóvenes priistas se alejaran del partido, que bajaran los brazos y no activaran las estructuras que durante bastante tiempo habían venido construyendo. Quizás porque el Chino Cedillo era muy cercano al grupo de Aristóteles Sandoval, la realidad es que la decisión de Alito generó hondo malestar en el priismo. Ahora vuelven a circular versiones sobre el cuestionado paso de Julio César Covarrubias como Especialista en Procesos de Información del Instituto de Pensiones del Estado de Jalisco.  Veremos sí ya puesto en los reflectores del Congreso, su nombre adquiere una negativa notoriedad. 

Alito hasta la cocina 

 La cereza del pastel que regalará Alito a los priistas de Jalisco será la imposición de un nuevo dirigente que sea un alfil de sus intereses. La versión de que su amiga de toda la vida, la próxima diputada federal plurinominal Laura Haro, será la próxima presidenta del PRI ha caído como agua fría. 

Laura Haro ha sido una enjundiosa activista del municipio zapopano donde llegó a ser regidora. El resto de sus cartas credenciales que acompaña para aspirar a dirigir a los priistas es su cercanía con el círculo íntimo de Alejandro Moreno. La crítica al interior del priismo tiene que ver no solo con su corta experiencia, sino del deseo de Alito de tener a una dirigencia maleable y sumisa a sus intereses, además de que la gente se pregunta como hacer compatible las tareas en el legislativo con las partidistas que, nunca como hoy, exigen de tiempo completo. 

En cuanto se esparció el rumor de que Laura Haro puede ser la elegida, personajes ligados a la administración pasada de Aristóteles Sandoval se empiezan a mover a fin de intentar evitar el dedazo que parece cantado de Alito a favor de amiga.