Pablo y su ángel de la guardia
Estamos a la mitad del sexenio alfarista y los motores del futurismo político arrancaron con miras a la gubernatura del estado. Al interior del grupo de Enrique Alfaro sin duda que Pablo Lemus lleva mano y aventaja a sus posibles competidores. Será difícil no obtener la candidatura a menos de un grave imprevisto que escape de sus manos y control.
Los recientes acomodos en el gabinete estatal muestran la creciente influencia de la clase empresarial jalisciense y su papel cada vez más protagónico en las decisiones del poder ejecutivo. El nombramiento de Luis Roberto Arechederra como Secretario de Desarrollo Económico, siempre consultor de los organismos empresariales de Jalisco, fortalecen la posición del llamado grupo de la “Coparmex”.
Pablo ha trazado muy bien su ruta. A diferencia de Enrique Alfaro, Lemus ha decidido no meterse y pelearse en las canchas que le gusta y le han redituado puntos al gobernador. Mantiene una relación cordial con el jefe de los “leones negros” y es institucional en su trato con el gobierno federal.
Esa tersura política le ha permitido que las conferencias de prensa de la fracción edilicia de MORENA que encabeza Carlos Lomelí han sido de críticas y cuestionamientos de poca intensidad hacia el presidente municipal. Se dice que Pablo quiere blindarse y evitar toparse con algún contratiempo y por esa razón estaría convenciendo a Cynthia Cantero, que ha realizado un destacado papel en el Instituto de Transparencia, para que sea su ángel de la guardia en la Contraloría Ciudadana. Veremos sí dentro de Movimiento Ciudadano aparece un proyecto alternativo a Lemus.
La nostalgia por el poder
Los que tienen otros proyectos contrarios a Movimiento Ciudadano tratan de empezar a mover la patita. En este sentido ha llamado la atención la reciente configuración de un grupo de exfuncionarios del gabinete de Aristóteles Sandoval que tienen como raíz común haber coincidido en sus años mozos en la preparatoria 7 de la Universidad de Guadalajara.
Algunas consideraciones llaman la atención para evidenciar sus verdaderas intenciones. Después de ese convivio, de reencuentro entre viejos compañeros de prepa, se divulgó la conformación de una estructura encabezada por Salvador Rizo como presidente.
Chava Rizo tiene un fuerte enfrentamiento con el gobierno alfarista, específicamente con su jefe de gabinete, y alejado del PRI, trata de mantenerse vigente promoviendo reuniones de amigos y simpatizantes.
En la reunión destacó la presencia de personajes que conformaron el círculo intimo de Aristóteles Sandoval como su secretario particular y su jefe de gabinete y responsable de medios de comunicación, Giovanni Rivera y Alberto Lamas, respectivamente.
Lo llamativo es que el personaje central de la reunión fue el Rector General de la Universidad de Guadalajara, Ricardo Villanueva, miembro de esa generación, pero desde ahora impulsado desde diferentes frentes como posible candidato al gobierno del estado. ¿Será que desde el grupo de colaboradores cercanos al pasado gobierno, ven a Ricardo Villanueva el personaje ideal para reverdecer viejos laureles y volver a Casa Jalisco?
Se mete a la pista
Otro que también arrancó motores, tratando de emular a su famoso hijo, fue Don Antonio Pérez que envuelto en una meteórica y desenfrenada euforia trata de encarrilarse rumbo a Casa Jalisco.
Evidentemente al papa del Checo Pérez hoy en día se le abren las puertas y es atendido por diversas personalidades de la vida social, económica y política de Jalisco. La fama de su hijo es un picaporte para abrir puertas y sentarse en diversas mesas.
Dadas esas circunstancias, Antonio fue cortejado por el PANAL, por el PVEM, hasta que se decidió aceptar la invitación de sumarse a MORENA. No olvidar que para el pasado proceso electoral buscó ser candidato a presidente municipal. Su proyecto era llegar a Guadalajara y proyectarse para el 2024. En el camino se le cruzó Carlos Lomelí y por eso su resentimiento hacia el actual regidor morenista.
Algunos han descalificado y minimizado sus aspiraciones. Pero Jalisco ya ha registrado experiencias donde personajes como Alberto Cárdenas y Emilio González fueron ridiculizados cuando manifestaron sus intenciones de alcanzar la gubernatura del estado y el hartazgo ciudadano contra los grupos de poder dominantes les abrió las puertas de Casa Jalisco. Quizás Don Antonio no trae un bólido como su hijo, pero la realidad es que ya se metió a la pista.
