La inflación sigue sin ceder. En el mes de noviembre registró su mayor nivel desde inicios del 2001, de acuerdo con los datos divulgados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) presentó un avance mensual de 1.14%, el mayor que se presenta desde enero del 2017. En tanto, a tasa anual se aceleró desde 6.24% de octubre hasta 7.37% en el penúltimo mes del año.
Con esto, la inflación alcanzó un nivel que no se veía desde enero del 2001, cuando los precios al consumidor incrementaron 8.11% anual.
El mercado esperaba un alto nivel de inflación en noviembre ante los choques de oferta que se han generado a nivel mundial; sin embargo, el dato final fue mayor a lo que se pronosticaba.
De acuerdo con un sondeo de Reuters, los analistas preveían que en noviembre el INPC presentara una variación anual de 7.22 por ciento.
Ante los altos niveles de inflación, y el panorama de que ésta acabe muy por arriba del objetivo del Banco de México (Banxico) de 3% +/-1 punto porcentual al cierre del año, se espera que la institución central aumente por quinta vez consecutiva su tasa de referencia.
La próxima reunión de política monetaria se llevará a cabo el próximo 16 de diciembre.
Mercancías, energéticos y agropecuarios provocan las mayores presiones
Si bien se observó una presión tanto en el rubro subyacente como no subyacente, fueron las mercancías, los energéticos y agropecuarios los que tuvieron una mayor incidencia anual en la inflación, es decir, los incrementos que presentaron los precios de estos genéricos contribuyeron en mayor medida al avance de la inflación en el mes.
En el caso de las mercancías, los precios de estas aumentaron 7.24% en comparación anual, mientras que los servicios incrementaron en 3.59 por ciento.
Lo anterior llevó a la inflación subyacente, que elimina de su cálculo los bienes y servicios con precios más volátiles, a un nivel de 5.67% anual.
Por su parte los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno aumentaron en 11.26%, esto explicado en mayor medida por la recuperación este año de los precios del petróleo. En el caso de los agropecuarios, el aumento fue de 14.36 por ciento.
De esta manera, la inflación no subyacente incrementó 12.61% anual.