La inflación al consumidor en Estados Unidos, que alcanzó su mayor nivel en 31 años, de 6.2%, añadió presión a la Reserva Federal para que anticipe el aumento en su tasa de interés, advirtió el economista en jefe de Invex, Ricardo Aguilar Abe.
“Si se mantiene esta tendencia de presión en la inflación, la Reserva Federal puede endurecer su política monetaria adelantando el aumento en la tasa, lo que propiciará un ajuste importante en las Bolsas de Valores”, comentó.
El especialista refirió además que “como pocas veces y más sobre niveles tan elevados, las tasas anuales de inflación de México y Estados Unidos se igualaron en 6.2% en octubre”.
Este contexto alimentó su expectativa de un voto unánime en la decisión monetaria de la Junta de Gobierno de Banco de México, que se completará este mediodía.
Como se recordará, las alzas de tasas de junio, agosto y septiembre, de 25 puntos cada una, se tomaron en decisiones por mayoría, las dos primeras de tres a dos y la de septiembre, fue de cuatro a uno.
Será muy relevante que los cinco miembros voten por subir la tasa en congruencia con el mandato constitucional del Banco de México, que es preservar el poder adquisitivo de la moneda, advirtió el Economista en jefe de Invex, Ricardo Aguilar Abe.
Con él concuerdan el economista en jefe para México y Canadá en Bank of America Securities, Carlos Capistrán y el director para América Latina de la consultoría Moody´s Analytics, Alfredo Coutiño.
Desde Nueva York, el economista en jefe para México y Canadá en Bank of America Securities explicó que Banco de México tendrá que subir la tasa uno a uno con la Reserva Federal.
Expectativas y dosis
De acuerdo con el especialista de Moody´s Analytics, la contundencia en la posición de Banxico frente a la inflación y al tapering no deja lugar a dudas. Debe actuar con un alza mayor al cuarto de punto en noviembre.
“No solo debe actuar para que las condiciones monetarias funcionen de manera más normal. Es también para evitar una reacción agresiva por parte de los mercados ante el inicio del tapering y el riesgo de que se adelante el alza de tasas en Estados Unidos”, agregó.
Desde Filadelfia explicó que normalizar rápido la postura monetaria es “la vacuna” para estar en posición de enfrentar las contingencias que se presenten de parte de los mercados cuando comience la reducción de compra de valores de parte de la Fed, a fines de este mes.
Coutiño explicó que el escenario base sería de un alza de tasas para este mediodía de 50 puntos base y el optimista de 75 puntos. Esto llevaría la tasa a 5.25 o 5.50 por ciento.
Con él concuerda el economista para América Latina en Goldman Sachs, Alberto Ramos que considera que sí han subido las posibilidades de un incremento de medio punto en la tasa este mismo jueves, por la generalización de las presiones inflacionarias evidentes en el dato de octubre.
Ligeramente restrictiva
Los expertos de BofA Securities y Goldman Sachs no descartan que la persistencia de la inflación y el efecto de la decisión monetaria de Estados Unidos orille a Banco de México a llevar la política monetaria a terreno más cerca del restrictivo.
El estratega de BofA Securities previó que las tasas en México van a seguir subiendo y que existe la posibilidad de que lleguen arriba de 7% en el 2023.
Mientras el experto de Goldman Sachs estima que podría llegar a 6.25 por ciento.
De acuerdo con Ramos, el endurecimiento de las condiciones financieras con el tapering y el eventual incremento en la tasa de interés de Estados Unidos, orillarán también al banco central a moverse de la neutralidad a una posición ligeramente restrictiva.
El anuncio monetario de este jueves será el penúltimo programada del año y también será la antesala de la última participación del gobernador Alejandro Díaz de León en las decisiones del banco central. El funcionario ha participado de forma consistente en las decisiones de subir la tasa desde junio.