
El jugador estrella del Manchester City, Kevin De Bruyne, aprovechó su día libre este domingo para viajar a su país y estar presente en el Gran Premio de Bélgica invitado por la escudería Red Bull.
El centrocampista estuvo desde temprano en el circuito de Spa-Francorchamps para convivir con el vigente campeón del mundo, el neerlandés Max Verstappen.
Entre De Bruyne y Verstappen hubo un intercambio de camisetas firmadas por ambas figuras mundiales, además de que Kevin pudo ser testigo en primera fila del 1-2 del equipo austriaco en Bélgica.