La pandemia acentuó algunos los riesgos psicosociales que padecían los trabajadores. El teletrabajo o trabajo en casa modificó hábitos y conductas; el impacto de los cambios provocados y, en muchos casos, la salud mental del trabajador mermó al afrontar diversos factores: comunicación ineficaz, presión excesiva, ausencia de liderazgo y una cultura organizacional deficiente.
El comité técnico de ISO / TC 283, cuya secretaría está a cargo de la certificadora inglesa BSI Group, publicó la ISO 45003:2021, Gestión de la seguridad y salud en el trabajo - Salud y seguridad psicológicas-, que contiene las directrices para administrar riesgos psicosociales con orientación hacia la gestión de riesgos de seguridad y salud psicológica dentro de un sistema de gestión laboral[1].
Para BSI Group, la importancia de implementar un sistema de gestión, a mediano plazo, brinda grandes resultados como el aumento de la moral y compromiso con la empresa en un 44%; el 35% mejora su salud al tener un mejor ambiente laboral e inclusivo, y se observa una reducción de ausentismo de hasta 31% por trastornos psicosociales.
Bienestar como un conjunto de todo lo que se necesita para vivir bien, tiene que ver con la condición sana del cuerpo físico, emocional y mental; es decir, no solamente es la ausencia de trastornos o enfermedades, y puede darse en entornos sociales, familiares o laborales.
Para el Ing. Carlos Pérez, especialista en Salud y Seguridad e Instructor de BSI Group México, “la salud mental en una situación de bienestar es un conjunto de procesos psíquicos relacionados con un estado temporal que nos permite llevar a cabo tanto funciones psíquicas como emocionales en estados favorables, o bien, para enfrentar situaciones adversas. Salud mental se debe leer como bienestar”.
La Organización Internacional del Trabajo menciona en su último reporte, que cerca de dos millones de personas mueren por factores ligados al trabajo; por ejemplo, enfermedades pulmonares, accidentes cerebrovasculares o cardiopatías. Se ha demostrado que hay una tendencia en cuanto al factor de riesgo cardiovascular
provocado por largas jornadas de trabajo, muy comunes en algunas empresas u organizaciones, señaló el especialista.
En México desde 2019 se cuenta con la NOM 035, que establece los elementos para identificar, analizar y prevenir los factores de riesgo psicosociales, así como para promover un entorno organizacional favorable en los centros y lugares de trabajo. Las empresas han tenido que asimilar dicha norma con énfasis en los riesgos psicosociales que afectan a los trabajadores, alentado por la pandemia.
Las organizaciones tienen que identificar los riesgos que ponen en peligro el bienestar de los trabajadores. Al respecto, se identifican tres principales predisponentes:
· Una estructura organizacional --es decir, la manera cómo se organiza el trabajo, incluyendo un liderazgo deficiente o por falta de políticas claras.
· Las relaciones sociales. Los ambientes laborales en los que hay discriminación, acoso, falta de reconocimiento y/o equidad de género.
· La cuestión física del entorno, que puede llevar a padecimientos, enfermedades o a un deterioro de la salud; por ejemplo, falta de seguridad, jornadas largas para lograr objetivos productivos, etc.
Las empresas que no toman acciones para mejorar el bienestar de sus empleados van quedando fuera del mercado: “Es necesario crear una cultura y ambiente agradables para los trabajadores, es el principio del fin de los jefes tiranos”, aseguró Carlos Pérez.
“Es necesario que las organizaciones identifiquen los riesgos o peligros, luego se gestionen, evalúen e implementen sistemas que administren la seguridad laboral, buscando ambientes saludables tanto físicos como mentales, cuyo objetivo sea prevenir o evitar accidentes e incidentes; por lo menos, que no sean incapacitantes”, confirmó.
En términos económicos, la Comunidad Europea señala que al implementar un sistema de bienestar las empresas obtienen un ROI de 1.5 a 3% en un periodo de 2 a 9 años. El trabajador incrementa su desempeño en un 2.2%.
“La ISO 45003:2021 no tiene como objetivo único tener impactos o beneficios financieros o la llana obtención de una certificación. Este estándar presenta los elementos adecuados para generar un ambiente favorable, hacer que el trabajador se sienta en casa, en un ambiente sano y saludable en lo físico, psicológico, emocional y cognitivo”, concluyó Carlos Pérez.