Cuatro años antes del secuestro de Ángel Losada, dueño de Grupo Gigante, un grupo de extranjeros, con nexos terroristas en España y Colombia, perpetró el secuestro del arquitecto Bosco Gutiérrez Cortina, quien estuvo privado de su libertad durante 257 días.
Sus secuestradores lo mantuvieron meses desnudo. Además, durante más de medio año estuvo en un cuarto sin ventanas, en el que tres pasos le bastaban para recorrerlo.
“En medio del encierro, entendí algo que me cambió para siempre: Todo tiene sentido cuando le entregas a Dios el mando de tu vida”. aseguró el arquitecto años después de haber escapado de sus agresores.
Pese a las condiciones adversas, el arquitecto Bosco Gutiérrez Cortina estableció una relación con sus captores e incluso les habló de Dios durante la Navidad, gracias a una nota que les dejó en la que les indicaba: “Hoy no somos secuestrado ni secuestradores”.
A más de 35 años que inició su cautiverio, esta es la historia del secuestro de Bosco Gutiérrez Cortina.

