A principios de mayo del 2022 ante las crecientes presiones inflacionarias, el gobierno federal anunció la implementación de medidas de distintas esferas para contener el impacto del aumento de precios en México.

El Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic) incluye una serie de intervenciones de política pública para regular los precios de 24 productos básicos en la cesta de consumo de las familias mexicanas. A poco más de dos meses de operación, se ha observado que sólo nueve productos de los 24 han mostrado una caída en su nivel de precios o, al menos, una estabilización.

Al corte de la primera quincena de julio del 2022, sólo el aceite, el bistec de res, la leche de vaca, las tortillas de maíz, la manzana, el frijol, el jitomate, el pan de caja y el jabón de tocador han logrado resultados positivos.

Esto no necesariamente significa que estos nueve productos se estén comercializando a precios más bajos. Sólo significa que, en la tendencia que muestra su nivel de precios, se observa que desde la implementación del Pacic sus tasas de inflación interanuales se han mantenido en un nivel estable.

Es importante resaltar que la mayoría de los productos que contiene el Pacic, incluso los que han logrado estabilizar sus precios, muestran tasas de inflación interanual mayores a la general nacional (8.16 por ciento).

Al corte de esta primera mitad de julio, la papa, por ejemplo, alcanzó una tasa de inflación de 59.1% en comparación con el mismo periodo del año previo, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Esto ubicó a este producto como el que presentó el encarecimiento más pronunciado del programa.

Los únicos productos que contempla esta iniciativa que presentan encarecimientos inferiores a la tasa de inflación general son: las chuletas de cerdo, la zanahoria, el arroz, el azúcar, el frijol y el jitomate.