
El presidente Andrés Manuel López Obrador criticó a los ministros y ministras de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) por declarar inconstitucional el decreto por el que la Guardia Nacional (GN) se incorporó administrativa y operativamente a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
“Ocho ministros de la Suprema Corte, con excepción de tres, actuaron de manera facciosa y no con criterio jurídico sino político, defendiendo las antiguas prácticas del régimen autoritario y corrupto” acusó.
El mandatario recordó que el modelo de seguridad que mantuvo la Corte sirvió en su momento para que la Policía Federal, a cargo del exsecretario Genaro García Luna, estableciera relaciones de complicidad con la delincuencia organizada y la “delincuencia de cuello blanco”.
“Los ministros de la Corte están al servicio de las cúpulas de poder y no de la mayoría del pueblo de México”, insistió.
Tras la decisión de la Suprema Corte, López Obrador ordenó a la secretaria de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSPyPC), Rosa Icela Rodríguez, mantener al general retirado David Córdoba Campos como comandante de la Guardia Nacional e iniciar un recorrido por todas las instalaciones y cuarteles de la corporación para informar a los 130 mil elementos que mantendrán sus salarios, prestaciones y ascensos, al igual que los integrantes de las fuerzas armadas.