José Luis Camacho Acevedo.
La gran pregunta que se hacen los ciudadanos a
unos cuantos días de celebrarse las elecciones más grandes de la historia
moderna de nuestra democracia es si el clima de violencia que se ha desatado a
lo largo de vastas regiones del país lograrán controlarlo el gobierno federal y
las autoridades electorales para llevar a cabo ese macroproceso comicial.
El crimen organizado controla una zona decisiva
para el resultado electoral en el estado de Michoacán.
En Sonora ya la interrogante no es si ganará
las elecciones Alfonso Durazo o le alcanzará el tiempo al Borrego Gándara para
alzarse con la victoria en la disputa por el gobierno de esa entidad. La
pregunta que se hacen los ciudadanos sonorenses es si habrá condiciones de
seguridad para salir a emitir su voto.
El cochinero que se está dando en Nuevo León
presagia una posible anulación del proceso electoral en el que va como claro
puntero Samuel García. Ante ese supuesto, un mandatario interino lo tendría que
designar el nuevo congreso estatal, una cámara que se dividirá en tres
fracciones dominantes: Movimiento Ciudadano, PRI y MORENA. Esa encomienda del
nuevo congreso neoleonés es un verdadero crucigrama que podría culminar, si no
hay acuerdo, en una desaparición de poderes.
Ese mismo supuesto, el de la desaparición de
poderes, se cierne ahora sobre el estado de Tamaulipas, donde además de los
problemas políticos, está la presencia de grupos muy fuertes del crimen
organizado.
Y se puede considerar en riesgo el proceso en
Sinaloa.
Las entidades que celebrarían comicios sin
incidentes graves por la intromisión del crimen organizado serían casos como
los de Querétaro, Chihuahua, Zacatecas, Colima, Tlaxcala, Nayarit y Campeche.
Pero nadie apuesta por unas elecciones
tranquilas en Baja California Sur y San Luis Potosí y hasta en Baja California.
A tres semanas de las elecciones los
pronósticos se centran en sí habrá condiciones para que se realicen los
comicios más que en cuáles pudieran ser los partidos ganadores en los 15
estados que cambian gobernador y en la nueva correlación de fuerzas que habrá
en la nueva cámara de diputados.
EN TIEMPO REAL.
1.- En Querétaro sigue siendo el favorito para
ganar la gubernatura Mauricio Kuri, postulado por el PAN y el partido local
Querétaro Independiente que dirige Connie Herrera. Pero la sorpresa la está
dando el abanderado de Fuerza por México, Juan Carlos Martínez, quien ya superó
en intención de votos a Celia Maya de Morena y la abanderada del PRI.
2.- Los enterados aseguran que después de las elecciones
de junio, el presidente López Obrador hará cambios en su gabinete. Están en
capilla Irma Eréndira Sandoval y Luisa María Alcalde Luján. Y le llegaría el
turno de cambiar de camiseta al director de PEMEX, Octavio Romero Oropeza y al
efímero titular de la SCT, Jorge Arganis Díaz Leal.
3.- Evelyn Salgado Pineda, abanderada de Morena
a la gubernatura de Guerrero, va subiendo como la espuma y ya tiene el primer
lugar en los sondeos de preferencias electorales: “no me autonombre la ‘Torita’,
es la gente la que me dice así”, aclaró Evelyn, quien también se ha
comprometido que, en caso de ganar la elección, va a gobernar los seis años.