Jesús Sánchez
A ver a ver, vamos por partes.
La crisis institucional en el poder judicial no puede dejar de verse como parte
de las manchas que pintan al tigre de la 4T.
Porque además del zapateado sobre la Constitución que protagoniza la
mayoría en el Congreso para impulsar la Ley Zaldívar; las presiones para
revocar las decisiones del INE sobre las candidaturas de Félix Salgado y Raúl
Morón, y la intención de reventar al INE y a sus consejeros, hay una abultada
lista de temas que nos tienen al borde de la incertidumbre.
Los efectos negativos de
contrarreformas como la eléctrica, la de hidrocarburos, la esperada sobre el
outsourcing y la eventual reforma fiscal (que esperamos no sea otra caja de
ocurrencias), así como el relevo del titular del Banco de México, se suman a
otros frentes como el desempleo y el desplome de la inversión productiva.
Qué habrá
recuperación este año, todo apunta a que sí, pero los expertos señalan que será muy lenta y gracias
a la dinámica económica de los Estados Unidos y al sector privado nacional.
El crecimiento esperado del PIB en
2021 será ligeramente superior al 5 por ciento, pero será equivalente apenas a
la mitad de lo perdido en el 2020 y debajo del nivel de 2018.
En los distintos foros económicos se sopesa el efecto de las obras estrella
de este sexenio -la refinería de Dos Bocas, el aeropuerto Felipe Ángeles y el
Tren Maya-, y no ven un efecto significativo sobre la economía.
Y ojo, no hay que perder de vista que Pemex y la CFE son un barril sin
fondo y sus crecientes pasivos pueden empujar a que México pierda, tarde o
temprano, el grado de inversión.
Monreal se sacó de la manga la idea de regular a las empresas calificadoras
internacionales por “conflicto de intereses”, pero como en otros temas
controvertidos, pronto se le pasó.
Para el segundo trimestre de este 2021 el PIB alcanzará niveles de hasta
16.9 por ciento (El Financiero). Pero no hay que irse con la finta, pues
estaremos apenas a la mitad de lo que se perdió el año pasado y a partir de
2022 los niveles de recuperación serán como los de 2018, apenas rayando el 2
por ciento.
La cruda realidad es que pandemia aparte, nos falta por recuperar 2.8
millones de empleos perdidos. Está por demás decir que no hubo incentivos para
las empresas que evitaran el actual nivel de desempleo.
Lo más dramático es que entre 18 y 20 millones de personas siguen buscando
trabajo sin encontrarlo.
La pobreza sigue haciendo de las suyas. Datos del Coneval estiman un
aumento en el número de personas con un ingreso inferior a la línea de la pobreza,
entre 8.9 y 9.8 millones. Hoy en México hay 70.9 millones de pobres por
ingreso, el 56.7 por ciento de la población (Forbes).
El consumo en el mercado interno sigue deprimido.
Zaldívar en lo oscurito
En el contexto político la confrontación y la desconfianza son las estrellas.
Que se sepa la Suprema Corte de
Justicia de la Nación está para velar que se cumpla el Estado de Derecho, pero
parece que las acciones recientes favorecen el estado de lo chueco. Parece
chiste pero no lo es.
Lo que sorprende es el silencio
del ministro Arturo Saldívar. En un solitario tuit, el ministro le regaló un
“me gusta” a la carta de magistrados y jueces contra la “Ley Saldívar”, pero
nada mas. Nadie duda que se lo llevaron a lo oscurito.
Si no hay rectificaciones, la reforma judicial en la que tanto se
esforzaron, quedará como una pifia por el cachirulazo del artículo transitorio.
Aparte, el TEPJF está por emitir un nuevo fallo sobre las resoluciones del
INE que echaron abajo las candidaturas de Félix Salgado y Raúl Morón. Si el
TEPJF vota a favor de estas candidaturas, tendremos tiempos oscuros para la
democracia mexicana.
Columnómetro de
Aquiles Baeza.
1.- ¿La nueva verdad
histórica?
Fuertes las
declaraciones que de su puño y letra escribió el ex gobernador Ángel Aguirre
Rivero en un artículo de Milenio 17-04-21, en el que dibuja al abogado de los
padres de familia de los jóvenes normalistas de Ayotzinapa, Vidulfo Rosales,
como un dique en las investigaciones de esta masacre, pero también como el
principal promotor de la campaña de Félix Salgado.
Vidulfo, dice
Aguirre Rivero, exigió no politizar el caso Iguala, pero fue quien llevó a los
padres a un mitin de Salgado donde le pidieron castigo a los responsables de la
masacre, y hoy anuncia que de confirmarse el fallo contra Salgado, entrará a
escena el biocot electoral.
Lo más extraño
es que la CNDH emitió un boletín en el que hizo un extrañamiento a Aguirre
Rivero y apeló al espíritu de la ONU para defender a Vidulfo.
¿Será ésta la
nueva verdad histórica de la que tanto se habla?
Fuera máscaras,
rubricó el ex gobernador.
2.- Tuitazo de la
semana.
__¿Ya salió del baño
Mario Delgado?
3.- Memelandia
Dicen que el
gobierno capitalino no reparte frijol con gorgojo en sus despensas, ¿pero qué
tal en el arroz? Eso dicen.
4.- Condenados al olvido.
La gobernadora Nacional Indígena de México,
Candelaria Lázaro, lamentó que siga siendo un lugar común que los políticos solo
tomen en cuenta a los indígenas cuando hay elecciones.
Pero de la crítica pasó a la autocrítica.
En el Foro Binacional Migrante e Indígena
realizado en Oaxtepec, Morelos, Lázaro también advirtió que los indígenas se
juntan pero no se unen. El problema indígena no es la falta de leyes, sino que
“estamos esperando a que venga el gobierno a resolverlo todo y eso no va a
pasar”, lo más difícil es comprender que “sólo unidos podemos apoyarnos entre
todos”.
5.- Esta semana en La última y nos vamos
de Genaro Mejía, vía Newsletter de LinkedIn, “La batalla contra la
frustración”.
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