Transporte, alojamiento y comida gratuitos, repartición de tarjetas para utilizar un celular o simplemente abrazos para reconfortar frente al conflicto.
Son algunas de las numerosas muestras de solidaridad que se están viendo en la frontera de Ucrania con otros países, en medio de la invasión rusa.
Cerca de 660.000 personas han huido desde Ucrania a los países vecinos en los últimos seis días, según un comunicado de este martes de ACNUR, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados.
Hasta la fecha, todos los países vecinos han mantenido abiertas sus fronteras.
La mayoría huyó hacia Polonia, aunque miles de personas también cruzaron las fronteras hacia Hungría, Moldavia, Rumania y Eslovaquia.
"También sabemos que un número considerable se ha trasladado a la Federación Rusa", afirmó ACNUR.