Con las sistemáticas críticas y consignas de “dictadura, corrupción, opacidad y más pobreza” de la oposición en contra de Morena, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó la iniciativa de reformas de la presidenta Claudia Sheinbaum, que modifica la estructura del gobierno federal.
El dictamen contiene reformas a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal para crear tres nuevas Secretarías de Estado. Convierte al Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt) en la nueva Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación; y el Instituto de las Mujeres (Inmujeres) para ser la Secretaría de las Mujeres.
La propuesta del Ejecutivo plantea también el cambio de nombre de la Secretaría de la Función Pública por la nueva Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno, lo que diputados de la oposición del PAN, PRI y MC reprocharon en tribuna y con pancartas en el salón de sesiones, por considerar que el gobierno busca ser “juez y parte” en el “combate a la corrupción y la impunidad”, y que no garantiza transparencia en la administración pública federal.
Su rechazo se debió -expusieron- a que se autoriza a esta dependencia “ejercer las atribuciones en materia de transparencia, acceso a la información pública y protección de datos personales”, así como “establecer las políticas, bases y normativa para la determinación de la información de interés público que, en materia de anticorrupción y buen gobierno, se deba difundir proactivamente”.