José Luis Camacho Acevedo.
El pasado martes Emilio Lozoya y el fiscal
Alejandro Gertz Manero dieron la primera nota de ese día que, finalmente, se
convirtió en un martes negro por los otros acontecimientos que se dieron apenas
unas horas después.
El Fiscal Gertz anunció que el ex director de
PEMEX había presentado una denuncia de hechos en contra del ex presidente
Enrique Peña Nieto y quien fuera su secretario de Hacienda, Luis Videgaray
Caso.
“Cuenta con cuatro testigos y un video que
respalda su denuncia”.
Palabras más, palabras menos eso fue lo medular
de la acusación que conmocionó por unas horas a los mexicanos.
La extraordinaria reportera Miriam Moreno
aclaró en el noticiero de Ciro Gómez Leyva en TV Fórmula que los testigos
confirmados son quien fuera secretario particular de Lozoya, Rodrigo Arteaga y
el chofer, que era igualmente su jefe de escoltas, Norberto Gallardo.
Con esos “testigos” tan comprometidos con
Lozoya, no sería una sorpresa que los otros nombres aún pendientes de
confirmar, fueran una comadre del imputado y su jardinero.
El presidente López Obrador dijo que en el
supuesto de que los acusados, Peña, Videgaray y Felipe Calderón, resultaran
culpables con las pruebas que presente la defensa de Lozoya, tendrían la
obligación de presentarse a declarar.
Pero lo cierto es que la fanaticada, que
esperaba un espectáculo digno del Circo Romano con leones y gladiadores
luchando a muerte, poco a poco se va desencantando con tantas explicaciones
rocambolescas, barrocas e ininteligibles sobre las verdaderas cartas de gran
calado que de verdad puede tener bajo su manga Emilio Lozoya.
Grave para el escándalo mediático que ha
involucrado incluso comentarios presidenciales, que, en lugar del Circo Romano
prometido, el caso Lozoya terminara siendo una función que apenas merecería ser
presentada en una de las más modestas carpas del Circo Atayde, con todo y sus
payasos.
Así las cosas, Emilio Lozoya Austin dejará en
la opinión pública de que es más vivo que las autoridades que lo trajeron de
España bajo el supuesto del famoso criterio de oportunidad, y se convirtiera a
ese precepto jurídico en un malabar político del ex funcionario peñista que
bien pudiera llamarse “criterio de oportunismo”.
La denuncia de Lozoya dejó los espacios
mediáticos de privilegio al conocerse dos hechos que tensaron el ambiente
político nacional:
La primera fue el asesinato, lleno de dudas y
envuelto ya en especulaciones, del señor padre de doble compadre y gran amigo
de Peña, Nieto, Luis Miranda Nava.
El otro hecho fue la captura de uno de los
imputados como malversadores de fondos del área de seguridad nacional en
tiempos en que estaban bajo las órdenes de Miguel Ángel Osorio Chong.
Ese día en México se respiró un ambiente tan
tenso como el que se vivió en el último año de gobierno de Carlos Salinas de
Gortari con los asesinatos políticos de Luis Donaldo Colosio y José Francisco
Ruíz Massieu.
Y es que, con todo el respeto que siempre me ha
merecido la ministra Olga Sánchez Cordero, la actual secretaria de gobernación
no tiene la experiencia ni los contactos con los que Fernando Gutiérrez
Barrios, Jesús Reyes Heroles o el profesor Enrique Olivares Santana podían
administrar momentos de crisis.
Crisis que pueden reventar en cualquier momento
a la 4T si no se definen con claridad los límites de las agresiones políticas.
EN TIEMPO REAL
1.- Enorme acierto la gestión del canciller
Marcelo Ebrard para que México pueda obtener una vacuna contra el Covid-19 para
principios de 2021.Y lo mejor es que no sólo se garantizará para nuestro país,
también será distribuida a precios accesibles en América Latina.
La vacuna experimental desarrollada por la
Universidad de Oxford y AstraZeneca que producirán Argentina y México es
considerada "la más avanzada" hasta el momento, así lo dio a conocer
Marcelo Ebrard, además la iniciativa cuenta con la inversión de la Fundación
Carlos Slim; si es exitosa, la vacuna costará entre 3 y 4 dólares y se
distribuirá sin lucro económico.
2.- El químico Héctor Melesio Cuén Ojeda del
Partido Sinaloense y Movimiento Ciudadano; y el empresario Jesús Vizcarra Calderón
por Morena, con el 23% y 36% de las preferencias respectivamente, lideran la
lista de los personajes que aspiran a la candidatura para las elecciones a
gobernador en Sinaloa el próximo 2021.
Lo anterior es el resultado de la encuesta
realizada por la consultoría Statu Quo Advance, pero los números cambian en
distintos escenarios, a través de distintas combinaciones entre candidatos y
partidos.
Ya que si Jesús Vizcarra fuera el abanderado
del PRI ganaría con un 33% de los votos, contra un 6% de los votos para el
senador Rubén Rocha Moya, como candidato del partido del presidente Andrés
Manuel López Obrador.
3.- Será a principios del mes de septiembre que
Carlos Joaquín González rendirá su Cuarto Informe de Gobierno de Quintana Roo,
mismo que será virtual, ante la situación generada por la pandemia de COVID-19.
Advirtió que se está organizando la preparación
para que el informe rendido de manera virtual sea innovador y que cuente con la
participación vía remota de varias autoridades.
La idea es no generar aglomeraciones para
prevenir contagios del nuevo coronavirus entre la ciudadanía, así como también
generar una entrega de resultados austera, redireccionando los recursos hacia
otras áreas como salud y apoyo social al ser las de mayor demanda ante la
situación actual.