Hasta hace unos años, el nombre de Héctor Alejandro Cabrera Fuentes solía aparecer en los titulares de la prensa por sus desarrollos en la medicina y los reconocimientos que se había ganado.
Pero desde 2020, quedó involucrado en un caso de espionaje del que este martes se declaró culpable.
En una audiencia en un tribunal de Miami, Cabrera Fuentes aceptó haber realizado labores de inteligencia ilegal para Rusia desde Estados Unidos.
"Me declaro culpable", le dijo al juez al Donald M. Middlebrooks después de que la fiscalía enlistó todas sus actividades ilegales en EE.UU. para espiar y entregar información sobre el país a un "agente del gobierno" ruso.
Ahora enfrenta una sentencia de hasta 10 años de prisión la cual será dictada en mayo próximo.
Cabrera Fuentes y su esposa fueron detenidos en Miami, Florida, en posesión de información que el gobierno de EE.UU. consideraba parte de una acción ilegal en su territorio.
El sospechoso tenía como objetivo ubicar el vehículo de "una fuente del gobierno de Estados Unidos", informó el Departamento de Justicia al anunciar su detención en febrero de 2020.
Según la investigación, los mexicanos lograron el cometido, pero fueron detenidos en el Aeropuerto Internacional de Miami, cuando pretendían viajar a México.