En un cambio radical, el gobierno de México comenzará a buscar la extradición desde Estados Unidos a traficantes de armas, con el objetivo de que paguen en territorio mexicano por introducir equipo bélico utilizado por los cárteles de la droga en miles de asesinatos en los últimos años.
De acuerdo con Milenio, la intención de ello es solicitar a la administración de Joe Biden que entregue a una decena de traficantes de armas mexicanas y estadounidenses libres o que se encuentran sentenciados en prisiones de dicho país y que puedan ser enjuiciados en México debido a su responsabilidad en la violencia que se ha vivido en territorio nacional.
Además, se dio a conocer que el gobierno mexicano planea perseguir vigorosamente a quienes trafiquen con armas, aún cuando hayan cometido el delito en territorio estadounidense.
Es necesario resaltar que entre los objetivos iniciales de esta petición se encuentran algunos de los acusados del fallido “Rápido y Furioso” de 2011, ya que, entre 2009 y 2011 entraron a territorio nacional al menos 2 mil 500 armas y con el tiempo terminaron en las manos de diferentes cárteles del narcotráfico.
Además, uno de los traficantes que están en la mira del gobierno federal es Daniel Francisco Cruz Morones, quien en 2012 se declaró culpable de comprar armas de manera ilegal y con la intención de permitir su tráfico a México por una Corte en San Diego.
Cabe mencionar que entre 2006 y 2019, en México se aseguraron casi 223 mil armas, de las cuales 59 por ciento fueron fusiles, carabinas, rifles y escopetas; mientras que el 41 por ciento fueron cortas , como pistolas y revólveres.