No hay la menor duda sobre la lealtad del Ejército y Armada de México al pueblo y a la patria; más allá y a los políticos. Han sido inculcados desde que son cadetes en jamás traicionar al pueblo, bajo ninguna circunstancia.

A partir del último año de Enrique Peña Nieto, el número de soldados y marinos creció en el país en forma exponencial, de manera similar al presupuesto destinado por el gobierno federal a ese sector estratégico de la seguridad nacional.

En este año, las fuerzas armadas suman 262 mil soldados; 88 mil marinos y 31 mil miembros de la Fuerza Aérea. Todos ellos encargados de la defensa del territorio y soberanía nacional, en tanto que la Armada, tiene a responsabilidad de vigilar las costas, el mar territorial y el espacio aéreo marítimo, en tanto que la FAM, defiende el espacio aéreo, en 18 bases militares en todo el país.

Lejos de criticar esa acción, es importante analizar las áreas de responsabilidad de cada uno de los actores en la vida política, administrativa y constitucional del país. No podemos quitarle ni darle mayores facultades que las que establece la Constitución, y eso lo saben en Palacio Nacional.

Con Felipe Calderón, cuando sacó las tropas para pelear con el crimen organizado, estimaba que sería temporal. Sin embargo, Felipe no percibió el tamaño de los tentáculos de los criminales y que era complicado contener un fenómeno que crecía en forma desorbitante en todo el mundo y como centro de operaciones nuestro país.

Enrique Peña Nieto, siguió el mismo camino e incluso, quería dejar en manos de la SEDENA, lo que él había iniciado como la Gendarmería, una institución policiaca con responsabilidades federales.

En este punto nuestra clase política, los gobernadores, cayó y su zona de confort. Se dieron cuenta que era la mejor manera de descargar toda responsabilidad contra el crimen organizado y desorganizado, en sus territorios. Así desmantelaron las policías estatales y municipales.

Con López Obrador, éste demostró el pánico que tenía las Fuerzas Armadas ante lo que algunos de sus colaboradores temían, al poder encabezar un golpe de estado en contra de su gobierno socialista. Desconfiaba de su lealtad. Se olvidó de un principio: las fuerzas armadas respetan y protegen al pueblo que había lo elegido como presidente.

Para AMLO era fácil crear un nuevo organismo, la Guardia Nacional, una corporación similar a la de Estados Unidos, con formación castrense.

En México, la estructura diferente a la de EU. Defensa Nacional es encabezada por un militar (allá por un civil).

Pero déjame ofrecerte un poco de historia: después de la Revolución Mexicana, el país fue gobernado por generales y con puño de hierro, con maximatos. Ahí está la historia de los gobiernos de Álvaro Obregón, Plutarco, Elías Calles, Pascual, Ortiz Rubio, Emilio, Portes Gil, Abelardo del Rodríguez, Lázaro Cárdenas y Manuel Ávila Camacho.

Ávila Camacho, tomó la decisión de mantener a los generales y militares fuera de la política para evitar los movimientos sociales que había generado los militares opositores al oficialismo Manuel Enríquez Guzmán y Juan Andreu Almazán, que buscaban la Presidencia.

A mediados del siglo pasado todo militar que quisiera un puesto de elección popular o burocrático necesitaba dejar de ser activo. Renunciar a la vida activa en la milicia.

Sin embargo, con AMLO, en su miedo ante un golpe de estado militar, que repito es imposible en nuestro país, les dio posiciones de poder y dinero. Les entregó la administración de puertos, aeropuertos, obras de infraestructura, Aduanas, y otros sitios que tradicionalmente han sido nidos de corrupción.

Militarizar o hacer depender la Guardia Nacional de la Secretaría de Defensa Nacional, no es un acto meramente administrativo. Sí es necesario el ejército en las calles para recuperar la paz que los civiles arruinaron. Pero, de debe dar un tiempo para que regresen a los cuarteles; un tiempo en que cumplan con acabar con la violencia.

El fracaso de las autoridades civiles, obligan al pueblo a pedir milicia en las calles, pero no para siempre. López les dio grandes responsabilidades para debilitar la imagen de militares y marinos. Incluso, deja en sus manos juzgar por delitos del fuero común a guardias nacionales que abusen o violen derechos humanos.

No da fecha de caducidad ya que no se comprometen los presidentes civiles a cumplir con la responsabilidad de mantener un estado de derecho y de beneficio para su sociedad.

PODEROSOS CABALLEROS

PALMAS 915

La reactivación del proyecto Palmas 915 ha reavivado las sospechas sobre la existencia de redes de corrupción en el sector inmobiliario. La rapidez con la que este proyecto ha avanzado, a pesar de la oposición vecinal y los múltiples obstáculos legales, sugiere que detrás de él se esconden intereses políticos y económicos muy poderosos. La coincidencia entre la reactivación del proyecto y el cambio de administración en la Ciudad de México resulta cuanto menos sospechosa. La comunidad denunció la falta de transparencia en el proceso y ha expresado su temor de que el proyecto se lleve a cabo sin cumplir con los requisitos legales y ambientales. La historia de Palmas 915 es un claro ejemplo de cómo los intereses inmobiliarios pueden prevalecer sobre el bienestar de las comunidades. Es fundamental que las autoridades investiguen a fondo este caso y garanticen que se cumpla la ley.

MORENA

El cambio de dirección en Morena, con la asunción de Luisa María Alcalde y Andrés Manuel López Beltrán, se aprecia la mano de AMLO de crear un Maximato para imponerse. Desde ahí presionará a la presidenta Claudia Sheinbaum y a los gobernadores afines a la 4T. Y como dice Andy, “la labor de Morena será mantener el legado de AMLO”. Lo mejor es que se vaya a su casa y deje gobernar a Claudia. Él fue electo por 5 años y 10 meses y la próxima semana se termina. Andy o Amlito, es el proyecto de López para el 2030. Si no lo es, entonces que se vayan a sus casas.

RESPONSABILIDAD SOCIAL Y GOBERNANZA

UNITED AIRLINES

Con el liderazgo de Rolf Meyer, United Airlines, junto con Women in Aviation International (WAI), organiza estos eventos en diferentes países, acercar e inspirar a más niñas a estudiar carreras relacionadas con la aviación.

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