Los beneficios de la práctica de deporte y actividad física para tu salud
Si aún tienes dudas acerca de si incorporar o no la actividad física regular, el ejercicio o el deporte como elemento transversal en tus intervenciones de psicología te animo a seguir leyendo y conocer en detalle algunos de los beneficios que ofrece a nuestra salud mental.
Beneficios sobre la autoestima
La práctica de actividad física nos hace sentir muy bien con nosotros mismos. Además, el ejercicio físico es una actividad muy visual que, a menudo, suele acompañarse de percepciones más positivas de la propia imagen corporal y de un incremento de la autoeficacia física, todo esto aumentando la autoestima.
Mejora el estado de ánimo
Aunque para lograr un efecto a largo plazo es necesario llevar un estilo de vida activo, tan solo 10 días de ejercicio físico moderado durante 30 minutos ya produce mejoras significativas en el estado de ánimo. Como prueba de ello podemos observar como prácticamente el 100% de las personas que padecen depresión son menos activas físicamente.
Facilita la interacción social
En personas que presentan dificultades para relacionarse la práctica de algún deporte cooperativo o por equipos es una manera muy eficaz de favorecer la interacción social y reducir el aislamiento. Además, el incremento en la autoconfianza también facilita la socialización y previene la soledad.
Reduce el estrés y la ansiedad
Después de un duro día de trabajo, no hay nada mejor que desconectar en clase de spinning, jugando un partido de pádel o dando un paseo por la playa. Se ha comprobado que la práctica de ejercicio físico incrementa la producción de noreprinefrina, un químico cuya acción es capaz de moderar la respuesta del cerebro al estrés. Así que ponte la ropa de deporte y a sudar un poquito!!
Mejora las funciones cognitivas
Se ha demostrado en numerosos estudios que las personas que permanecen activas durante toda la vida tienen un mejor desarrollo de las funciones cognitivas. Ejercitarse regularmente es bueno para el humor, la memoria y el aprendizaje. Asimismo, la práctica de ejercicio físico es altamente deseable a la hora de prevenir el deterioro cognitivo asociado con el envejecimiento, la demencia y las enfermedades neurodegenerativas.