
José Luis Camacho Acevedo
¿De verdad creerá Andrés Manuel López
Obrador que las instrucciones que manda al inefable Jesús Ramírez Cuevas
servirán para contener a Donald Trump?
¿Inocencia calculada o soberbia manifiesta?
Acaba de anunciar que en agosto los aranceles a productos mexicanos pueden irse al 30%.
Porque para la opinión pública, quien le tendió la trampa a Claudia Sheinbaum de llevarla a Sinaloa el mismo día en que Ovidio Guzmán se declararía culpable ante la corte de Chicago, con todos los beneficios que esa decisión traerá en el corto plazo al hijo del Chapo Guzmán, fue el habitante de Palenque a través de sus operadores políticos y mediáticos como el traidor de Jesús Ramírez Cuevas.
No se trata a estas alturas de ponerse un traje de nacionalista campechano para refutar a Jeffrey Lichtman, abogado de Ovidio quien denunció a la presidenta Sheinbaum como vocera del narco, sino de considerar que Donald Trump va en serio contra el tráfico de Fentanilo que cruza por la frontera mexicana hacia Estados Unidos.
Trump y sus
servicios de inteligencia tomaron ya como una carta fuerte a Ovidio Guzmán para
atrapar a narco políticos mexicanos.
El hijo de El Chapo resultó ser un gran
negociador ante Estados Unidos.
Casi 20 familiares de Ovidio cruzaron hacia el vecino país para radicarse allí. Llevaban maletas, se dice, llenas de dólares que nunca fueron revisadas por la inclemente ICE, migración, norteamericana.
Y en la Corte de
Chicago Ovidio se declaró culpable de varios delitos. Le impusieron una multa
de 80 millones de dólares, cantidad irrisoria en comparación con los miles de
millones que le genera a las organizaciones criminales el tráfico de drogas.
Ovidio, el gran negociador, nunca será condenado a cadena perpetua ni a una sentencia de los años que esperan a Genaro García Luna. Saldrá en libertad a una edad que le permitirá disfrutar su inmensa fortuna por muchos años, tanto a él como a sus tres generaciones venideras.
Sin duda, Ovidio es el gran negociador
ante Estados Unidos.
2.- ¿LAS FINTECH EN MÉXICO SON LAVADORAS
DE DINERO?
La anterior puede ser una afirmación temeraria si no fuera porque existen los siguientes datos como los que proporciona la reconocida analista financiera Alicia Salgado:
“Pareciera
que la explosión de empresas de tecnología financiera (#fintech) no para, pero
la realidad es que el número de #startups crece año con año, pero son pocas las
que alcanzan la escalabilidad y los estándares regulatorios para permanecer y
crecer en un mercado muy competido.
El asunto es clave porque los servicios fintech sí están ahí, hay 185 que dan préstamos, hay 136 que ofrecen pagos y remesas y, otros, gestión financiera de empresas, seguros, inversiones en activos digitales, etc.”
Fin
de la cita.
Pero
la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, que “preside” desde el 2021, ya con
AMLO como presidente, Jesús de la Fuente Rodríguez, ha tenido una gran
permisividad para la operación de las fintech.
Algunas como NU o Plata, las ha
convertido en bancos sin tener sus estados financieros de acuerdo a lo que
exigen las normas de la propia CNBV para el caso.
Está próximo el relevo en la
CNBV de Jesús de la Fuente.
Según
la ley vigente en la materia, “Ninguna persona que haya sido titular o suplente
del Comité Técnico del FOBAPROA (Organismo ya inexistente que fue sustituido
por el IPAB desde 1999) podrá desempeñarse como integrante de la Junta de
Gobierno de la CNBV.
El nuevo presidente del organismo citado deberá ser designado por la presidenta
de la república y ratificado por dos terceras partes de la Cámara de Senadores.
La
nueva CNBV, ante las amenazas arancelarias de Donald Trump (30% a partir de
agosto) deberá ser mucho más transparente en el cuidado que tenga de las
fintech que pueden estar convertidas en “lavadoras de dinero”.
Mucho
ojo con este tema.